Estallido social en Salta
Gendarmería ingresó en Tartagal. Se incendiaron edificios públicos, comercios y oficinas. El Comité de Crisis analiza una intervención federal. Los desalojos de esta madrugada provocaron un muerto.
La Gendarmería Nacional comenzó a ingresar a partir de las 16 de ayer (viernes 10) en la ciudad de Tartagal, en un intento por restablecer el orden en una ciudad que a esta hora todavía era tierra de nadie.
El presidente Fernando De la Rúa ordenó que “comiencen los aprestamientos de la Gendarmería para llevar la tranquilidad a todo lugar del territorio argentino donde se pueda estar afectando la seguridad de las personas”, según anunció el secretario de Seguridad Interior, Enrique Mathov.
El ingreso de los efectivos del Escuadrón Tartagal se produjo con algunos incidentes, pero los manifestantes son muchos menos que durante los incidentes de la mañana.
Mientras tanto, el Comité de Crisis analizaría la posibilidad de realizar una urgente intervención federal a la provincia, aunque el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, descartó que “por el momento” se tome esta medida.
Esta tarde piqueteros incendiaron edificios públicos y oficinas de empresas privadas.
Los manifestantes, que recorrían las calles de la ciudad con antochas, piedras y palos, comenzaron destruyendo la sede de la empresa de colectivos Atahualpa, que había despedido al piquetero muerto esta mañana en General Mosconi, Aníbal Verón, como consecuencia de la violenta represión policial que desalojó por la fuerza la ruta 34.
En el centro de la ciudad, los manifestantes coparon la comisaría 41, y tomaron como rehenes al comisario y a los cinco agentes que estaban en el lugar, quienes fueron trasladados a la planta de Refinor, y comenzaron a incendiar el edificio.
También incendiaron y saquearon la Municipalidad de la Ciudad, las oficinas de Telecom, la empresa de energía eléctrica –que durante media hora cortó el suministro–, la agencia y corresponsalía del diario El Tribuno, estudios y empresas pertenecientes a diputados provinciales, un hotel céntrico y un depósito judicial, entre otros.
Los manifestantes, que también saqueaban los lugares que incendiaban, quemaron automóviles que seguían ardiendo en distintas calles céntricas.
Como consecuencia de estos hechos, la CGT de Hugo Moyano anunció “medidas de lucha” que adoptará el lunes.
La CTA convocó a una movilización para esta tarde y el gremio de los transportistas, la UTA, llamó a un paro de cuatro horas en repudio a la muerte del chofer salteño.
Por otra parte, el titular de la cartera política, Federico Storani, resolvió suspender su participación en la cumbre de ministros del Interior del Mercosur, que se realizaba en Brasil, para retornar de inmediato a la Argentina.
Además, las fuentes gubernamentales manifestaron su preocupación por la “fuga” de presos, en medio de los incidentes registrados hoy en General Mosconi.
Según los informes de inteligencia y seguridad que llegaron a la Casa Rosada, aprovechando la confusión reinante en la provincia, “se habrían producido fuga de presos de cárceles salteñas, con la ayuda de grupos de narcotraficantes”.
El vocero presidencial, Ricardo Ostuni, en tanto, recordó que no fue una fuerza nacional, como la Gendarmería, la que despejó la ruta sino la policía salteña, con lo cual le otorgó responsabilidad a la provincia.
En el mismo sentido se refirió la ministra de Desarrollo Social, Graciela Fernández Meijide, al afirmar que los incidentes “desbordan” la tarea de su cartera y que tiene que ver “con la policía provincial”.
La Gendarmería Nacional comenzó a ingresar a partir de las 16 de ayer (viernes 10) en la ciudad de Tartagal, en un intento por restablecer el orden en una ciudad que a esta hora todavía era tierra de nadie.
El presidente Fernando De la Rúa ordenó que “comiencen los aprestamientos de la Gendarmería para llevar la tranquilidad a todo lugar del territorio argentino donde se pueda estar afectando la seguridad de las personas”, según anunció el secretario de Seguridad Interior, Enrique Mathov.
El ingreso de los efectivos del Escuadrón Tartagal se produjo con algunos incidentes, pero los manifestantes son muchos menos que durante los incidentes de la mañana.
Mientras tanto, el Comité de Crisis analizaría la posibilidad de realizar una urgente intervención federal a la provincia, aunque el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, descartó que “por el momento” se tome esta medida.
Esta tarde piqueteros incendiaron edificios públicos y oficinas de empresas privadas.
Los manifestantes, que recorrían las calles de la ciudad con antochas, piedras y palos, comenzaron destruyendo la sede de la empresa de colectivos Atahualpa, que había despedido al piquetero muerto esta mañana en General Mosconi, Aníbal Verón, como consecuencia de la violenta represión policial que desalojó por la fuerza la ruta 34.
En el centro de la ciudad, los manifestantes coparon la comisaría 41, y tomaron como rehenes al comisario y a los cinco agentes que estaban en el lugar, quienes fueron trasladados a la planta de Refinor, y comenzaron a incendiar el edificio.
También incendiaron y saquearon la Municipalidad de la Ciudad, las oficinas de Telecom, la empresa de energía eléctrica –que durante media hora cortó el suministro–, la agencia y corresponsalía del diario El Tribuno, estudios y empresas pertenecientes a diputados provinciales, un hotel céntrico y un depósito judicial, entre otros.
Los manifestantes, que también saqueaban los lugares que incendiaban, quemaron automóviles que seguían ardiendo en distintas calles céntricas.
Como consecuencia de estos hechos, la CGT de Hugo Moyano anunció “medidas de lucha” que adoptará el lunes.
La CTA convocó a una movilización para esta tarde y el gremio de los transportistas, la UTA, llamó a un paro de cuatro horas en repudio a la muerte del chofer salteño.
Por otra parte, el titular de la cartera política, Federico Storani, resolvió suspender su participación en la cumbre de ministros del Interior del Mercosur, que se realizaba en Brasil, para retornar de inmediato a la Argentina.
Además, las fuentes gubernamentales manifestaron su preocupación por la “fuga” de presos, en medio de los incidentes registrados hoy en General Mosconi.
Según los informes de inteligencia y seguridad que llegaron a la Casa Rosada, aprovechando la confusión reinante en la provincia, “se habrían producido fuga de presos de cárceles salteñas, con la ayuda de grupos de narcotraficantes”.
El vocero presidencial, Ricardo Ostuni, en tanto, recordó que no fue una fuerza nacional, como la Gendarmería, la que despejó la ruta sino la policía salteña, con lo cual le otorgó responsabilidad a la provincia.
En el mismo sentido se refirió la ministra de Desarrollo Social, Graciela Fernández Meijide, al afirmar que los incidentes “desbordan” la tarea de su cartera y que tiene que ver “con la policía provincial”.
