El Senado confirmó a Maccarone
La Cámara alta aprobó los pliegos del nuevo titular del BCRA tras un arduo debate en el Chrystian Colombo debió acudir para convencer a la opositora bancada justicialista.
El cambio en la presidencia del directorio del Banco Central (BCRA) entre el destituido Pedro Pou (cuyo manejo del banco frente a los casos de lavado de dinero es cuestionado) y su sucesor Roque Maccarone, quedó formalizado ayer (miércoles 23) con la aprobación de la Cámara de Senadores.
El Senado aprobó los pliegos de la designación de Macaronne tras una sesión en la que el justicialismo se mostró como la fuerza a doblegar, puesto que presentó una enconada oposición al hombre puesto por el Presidente, Fernando de la Rúa.
En este sentido, cuando ya se pensaba que la sesión fracasaría por la negativa de la bancada del PJ, el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, se presentó en el recinto con el objetivo de convencer al peronismo de que acepte a Macaronne –lo que logró tras un ferviente discurso ante los legisladores–.
En concreto, el justicialismo se oponía a que Macaronne asumiera la titularidad del Central argumentanto una contrariedad con la ley de ética pública (que establece un año de plazo obligatorio entre la asunción de un cargo público y el último empleo en el sector privado), puesto que el funcionario había sido hasta abril asesor del Banco Galicia.
El cambio en la presidencia del directorio del Banco Central (BCRA) entre el destituido Pedro Pou (cuyo manejo del banco frente a los casos de lavado de dinero es cuestionado) y su sucesor Roque Maccarone, quedó formalizado ayer (miércoles 23) con la aprobación de la Cámara de Senadores.
El Senado aprobó los pliegos de la designación de Macaronne tras una sesión en la que el justicialismo se mostró como la fuerza a doblegar, puesto que presentó una enconada oposición al hombre puesto por el Presidente, Fernando de la Rúa.
En este sentido, cuando ya se pensaba que la sesión fracasaría por la negativa de la bancada del PJ, el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, se presentó en el recinto con el objetivo de convencer al peronismo de que acepte a Macaronne –lo que logró tras un ferviente discurso ante los legisladores–.
En concreto, el justicialismo se oponía a que Macaronne asumiera la titularidad del Central argumentanto una contrariedad con la ley de ética pública (que establece un año de plazo obligatorio entre la asunción de un cargo público y el último empleo en el sector privado), puesto que el funcionario había sido hasta abril asesor del Banco Galicia.
