El país, en clima de grave crisis

El ministro de Economía, Ricardo López Murphy, anunciará mañana (viernes 16), por la tarde y “presumiblemente por la cadena oficial” de radio y televisión, las medidas que conformarán su programa de gestión, según confirmó hoy el vocero presidencial, Ricardo Ostuni.

El portavoz oficial desmintió por la mañana las versiones de renuncia de López Murphy, quien asumió su cargo hace sólo 10 días.

Sin embargo, esas versiones volvieron a recrudecer por la tarde y dispararon la tasa de riesgo país a altísimos niveles, similares a los que alcanzó en octubre, durante la crisis política generada por la renuncia del vicepresidente Carlos Alvarez.

La tasa de riesgo país aumentó hoy 10% y llegó hasta 883 puntos básicos, con lo que totalizó un incremento de 25% desde la asunción de López Murphy.

Pese a ello, el ministro no logró hoy avances significativos en materia de respaldo político de parte del resto del oficialismo, mientras los gobernadores justicialistas aumentaron sus críticas hacia el Gobierno.

“Qué se yo; las versiones no las damos nosotros”, respondió el presidente Fernando de la Rúa cuando se lo consultó acerca de los rumores de renuncias, y se limitó a decir que “posiblemente” acompañará a López Murphy mañana, en el momento de los anuncios.

Acaso en un último intento por fortalecer el magro respaldo político con que cuenta el ministro, De la Rúa iba a reunirse esta noche, en la Residencia Presidencial de Olivos, con algunos ministros y gobernadores de la Alianza, según anunció el ministro del Interior, Federico Storani.

Precisamente Storani fue otro de los ministros cuya posible renuncia volvió a estar presente hoy en todos los corrillos, como lo estuvo en las últimas semanas y, especialmente, desde que trascendió que, días atrás, mantuvo una acalorada discusión con López Murphy acerca del tenor del programa económico.

Sin embargo, Storani desmintió una vez más su alejamiento: “En absoluto; estoy trabajando conforme a las indicaciones del gabinete y del Presidente”, dijo.

“Mi trabajo es político, estamos tratando de que se comprenda la situación difícil y tratando de encontrar alternativas que permitan que haya equidad”, agregó Storani.

Mientras tanto, con una dosis de realismo que no contribuyó a bajar la tensión, el secretario de Finanzas, Daniel Marx, anticipó que algunas de las medidas que anunciará el ministro “implican dolor”, pero advirtió sobre los efectos negativos que podrían generarse si no se adoptan.

Paralelamente, los gobernadores justicialistas reunidos en Santa Rosa declararon que “es hora de que (la Alianza) gobierne cumpliendo los compromisos federales y ejecutando fielmente el presupuesto vigente”.

Esa alusión al presupuesto no es inocente, ya que en las últimas horas trascendió que López Murphy se propone recortar en unos US$ 1.000 millones la asistencia a las provincias en relación con lo previsto.

Al término de esa reunión, el gobernador bonaerense, Carlos Ruckauf, aseguró que se comunicó con De la Rúa para transmitirle “la preocupación” de los mandatarios peronistas por la situación.

Vale destacar que, en sus diversas declaraciones de hoy, los gobernadores justicialistas no se refirieron únicamente a las medidas económicas –a varias de las cuales se oponen– sino también a los públicos enfrentamientos entre diversos miembros de la coalición gobernante.

Por otra parte, las principales centrales obreras preparan medidas de fuerza.

Ayer, Rodolfo Daer, líder de la CGT oficial, había advertido que esa agrupación dispondrá “enérgicas” medidas de protesta si el Gobierno dispusiera un nuevo ajuste.

Hoy trascendió que la CGT rebelde, que lidera el camionero Hugo Moyano, se apresta a definir en su plenario de mañana la fecha de un “paro nacional activo con movilización”, como protesta contra la política económica.

Moyano ya se habría asegurado la adhesión de la CGT oficial, la Central de Trabajadores Argentinos (CTA, que lidera el estatal Víctor De Gennaro) y la Corriente Clasista y Combativa (CCC, que encabeza el municipal jujeño Carlos El Perro Santillán).

Para completar el panorama, trascendió esta noche que la sede local de una importante agencia noticiosa internacional dispuso para el próximo fin de semana un diagrama de guardias similar al que se montó el fin de semana pasado en Asunción, cuando una crisis política hizo temer hasta la posibilidad de un golpe de estado.

No es que en la Argentina exista hoy una posibilidad tan extrema, pero nadie se anima a descartar una nueva crisis de gabinete.

El ministro de Economía, Ricardo López Murphy, anunciará mañana (viernes 16), por la tarde y “presumiblemente por la cadena oficial” de radio y televisión, las medidas que conformarán su programa de gestión, según confirmó hoy el vocero presidencial, Ricardo Ostuni.

El portavoz oficial desmintió por la mañana las versiones de renuncia de López Murphy, quien asumió su cargo hace sólo 10 días.

Sin embargo, esas versiones volvieron a recrudecer por la tarde y dispararon la tasa de riesgo país a altísimos niveles, similares a los que alcanzó en octubre, durante la crisis política generada por la renuncia del vicepresidente Carlos Alvarez.

La tasa de riesgo país aumentó hoy 10% y llegó hasta 883 puntos básicos, con lo que totalizó un incremento de 25% desde la asunción de López Murphy.

Pese a ello, el ministro no logró hoy avances significativos en materia de respaldo político de parte del resto del oficialismo, mientras los gobernadores justicialistas aumentaron sus críticas hacia el Gobierno.

“Qué se yo; las versiones no las damos nosotros”, respondió el presidente Fernando de la Rúa cuando se lo consultó acerca de los rumores de renuncias, y se limitó a decir que “posiblemente” acompañará a López Murphy mañana, en el momento de los anuncios.

Acaso en un último intento por fortalecer el magro respaldo político con que cuenta el ministro, De la Rúa iba a reunirse esta noche, en la Residencia Presidencial de Olivos, con algunos ministros y gobernadores de la Alianza, según anunció el ministro del Interior, Federico Storani.

Precisamente Storani fue otro de los ministros cuya posible renuncia volvió a estar presente hoy en todos los corrillos, como lo estuvo en las últimas semanas y, especialmente, desde que trascendió que, días atrás, mantuvo una acalorada discusión con López Murphy acerca del tenor del programa económico.

Sin embargo, Storani desmintió una vez más su alejamiento: “En absoluto; estoy trabajando conforme a las indicaciones del gabinete y del Presidente”, dijo.

“Mi trabajo es político, estamos tratando de que se comprenda la situación difícil y tratando de encontrar alternativas que permitan que haya equidad”, agregó Storani.

Mientras tanto, con una dosis de realismo que no contribuyó a bajar la tensión, el secretario de Finanzas, Daniel Marx, anticipó que algunas de las medidas que anunciará el ministro “implican dolor”, pero advirtió sobre los efectos negativos que podrían generarse si no se adoptan.

Paralelamente, los gobernadores justicialistas reunidos en Santa Rosa declararon que “es hora de que (la Alianza) gobierne cumpliendo los compromisos federales y ejecutando fielmente el presupuesto vigente”.

Esa alusión al presupuesto no es inocente, ya que en las últimas horas trascendió que López Murphy se propone recortar en unos US$ 1.000 millones la asistencia a las provincias en relación con lo previsto.

Al término de esa reunión, el gobernador bonaerense, Carlos Ruckauf, aseguró que se comunicó con De la Rúa para transmitirle “la preocupación” de los mandatarios peronistas por la situación.

Vale destacar que, en sus diversas declaraciones de hoy, los gobernadores justicialistas no se refirieron únicamente a las medidas económicas –a varias de las cuales se oponen– sino también a los públicos enfrentamientos entre diversos miembros de la coalición gobernante.

Por otra parte, las principales centrales obreras preparan medidas de fuerza.

Ayer, Rodolfo Daer, líder de la CGT oficial, había advertido que esa agrupación dispondrá “enérgicas” medidas de protesta si el Gobierno dispusiera un nuevo ajuste.

Hoy trascendió que la CGT rebelde, que lidera el camionero Hugo Moyano, se apresta a definir en su plenario de mañana la fecha de un “paro nacional activo con movilización”, como protesta contra la política económica.

Moyano ya se habría asegurado la adhesión de la CGT oficial, la Central de Trabajadores Argentinos (CTA, que lidera el estatal Víctor De Gennaro) y la Corriente Clasista y Combativa (CCC, que encabeza el municipal jujeño Carlos El Perro Santillán).

Para completar el panorama, trascendió esta noche que la sede local de una importante agencia noticiosa internacional dispuso para el próximo fin de semana un diagrama de guardias similar al que se montó el fin de semana pasado en Asunción, cuando una crisis política hizo temer hasta la posibilidad de un golpe de estado.

No es que en la Argentina exista hoy una posibilidad tan extrema, pero nadie se anima a descartar una nueva crisis de gabinete.