El Gobierno quiere volver a emitir deuda
Saldrá al mercado "tan pronto como sea posible" para colocar títulos cuando la tasa del riesgo país baje a 650-670 puntos básicos. El 9 de enero se hará la primera licitación de Letes del programa 2001. Buscan preservar los fondos logrados.
El Gobierno acudirá a los mercados voluntarios internacionales de deuda “tan pronto” como la situación en las plazas se normalice y las ofertas en precio y condiciones que reciba sean compatibles con la novedosa situación de fortaleza financiera que supone la existencia del blindaje, según explicó ayer el ministro José Luis Machinea.
El objetivo que persigue la conducción de Economía es preservar los fondos del blindaje, una vez utilizados los primeros desembolsos para superar la actual situación de restricción, de manera de mantenerlos como una especie de seguro que aleje de la percepción de los inversores cualquier temor a una cesación de pagos.
“Vamos a ir a los mercados tan pronto como la situación se normalice”, dijo Machinea; según las versiones que circulan en el mercado, las emisiones internacionales (suspendidas desde septiembre) regresarían cuando la tasa de riesgo país se ubique cerca de los 650-670 puntos básicos.
El Gobierno ya adelantó su programa financiero para el año próximo, que contempla operaciones de mercado por un total de US$ 9.400 millones, de las cuales US$ 3.800 serán colocaciones locales.
El desglose supone la emisión neta de otros US$ 150 millones en Letes (el stock total de circulación pasará de los US$ 4.850 millones actuales a US$ 5.000 millones al finalizar 2001), US$ 600 millones en nuevos bonos-pagaré y otros US$ 3.000 millones en Bontes.
El plan contempla, además, la concreción de una serie de operaciones de canje. “Ya recibimos un rango mínimo de ofertas para cambiar títulos que vencen entre los años 2002 y 2005 por US$ 7.000 millones”, adelantó el subsecretario de Financiamiento, Julio Dreizzen.
En Economía aclararon que el programa financiero diseñado procura disminuir la presión “del sector público sobre los mercados de capitales y de crédito, de manera de liberar recursos al sector privado”.
El Gobierno acudirá a los mercados voluntarios internacionales de deuda “tan pronto” como la situación en las plazas se normalice y las ofertas en precio y condiciones que reciba sean compatibles con la novedosa situación de fortaleza financiera que supone la existencia del blindaje, según explicó ayer el ministro José Luis Machinea.
El objetivo que persigue la conducción de Economía es preservar los fondos del blindaje, una vez utilizados los primeros desembolsos para superar la actual situación de restricción, de manera de mantenerlos como una especie de seguro que aleje de la percepción de los inversores cualquier temor a una cesación de pagos.
“Vamos a ir a los mercados tan pronto como la situación se normalice”, dijo Machinea; según las versiones que circulan en el mercado, las emisiones internacionales (suspendidas desde septiembre) regresarían cuando la tasa de riesgo país se ubique cerca de los 650-670 puntos básicos.
El Gobierno ya adelantó su programa financiero para el año próximo, que contempla operaciones de mercado por un total de US$ 9.400 millones, de las cuales US$ 3.800 serán colocaciones locales.
El desglose supone la emisión neta de otros US$ 150 millones en Letes (el stock total de circulación pasará de los US$ 4.850 millones actuales a US$ 5.000 millones al finalizar 2001), US$ 600 millones en nuevos bonos-pagaré y otros US$ 3.000 millones en Bontes.
El plan contempla, además, la concreción de una serie de operaciones de canje. “Ya recibimos un rango mínimo de ofertas para cambiar títulos que vencen entre los años 2002 y 2005 por US$ 7.000 millones”, adelantó el subsecretario de Financiamiento, Julio Dreizzen.
En Economía aclararon que el programa financiero diseñado procura disminuir la presión “del sector público sobre los mercados de capitales y de crédito, de manera de liberar recursos al sector privado”.
