El gobierno definirá si la fusión global de Telefónica y Telecom recrea en el país el monopolio de Ente

El 15 de noviembre habrá en la casa matriz un nuevo directorio, que reunirá el control de la telefonía básica y celular del país. Dos veedores investigan si el papel que jugará dentro de Telecom Argentina el grupo Werthein asegurará la regulación.

26 octubre, 2007

Tras una década de haber sido desmembrado el monopolio estatal en las telecomunicaciones,
el gobierno analiza ahora si, por la vía privada internacional, la absorción
de Telecom por parte de Telefónica implica el regreso de esa hegemonía
erradicada en la telefonía básica y celular que ambas se reparten
en la Argentina.

Para ello, el ministro de Planificación, Julio de Vido, designó
dos veedores para empresas telefónicas luego de que entidades de defensa
de consumidores se movilizaran manifestando su preocupación por posibles
prácticas monopólicas, inmanentes de la fusión global.

La acción de las ligas de usuarios se produjo después de la controversia
que surgiera en el directorio de Telecom entre la parte italiana y la representación
del grupo local Werthein, que adquiriera el 48 % de la sociedad que controla
la operadora de una zona de la telefonía básica nacional, Nortel,
que se ventiló por medio de notas y aclaraciones ante la Bolsa de Comercio
sobre los efectos que el negocio internacional de absorción tendría
en la gestión de la firma en el país.

Mientras los directores de origen europeo adujeron que la compra de Telecom
por parte de Telefónica (a través de su subsidiaria Olimpia) y
el ingreso en el directorio de Telecom Italia no implicaría la toma de
posesión de la compañía en la Argentina, el grupo Werthein
insistió en someter el negocio a la salvaguarda estatal, lo cual se logró
a partir de la presión de los consumidores, que, además de contar
con el beneplácito del gobierno y del socio local, ofició de paraguas
para la intervención.

Así, los dos veedores ya trabajan dentro de Telecom Argentina, y en
el plazo de dos meses deberán informar sobre la operación a la
Comisión de Defensa de la Competencia y a la Comisión Nacional
de Comunicaciones.

En conferencia de prensa, De Vido, había asegurado que la decisión
se tomaba ante el anuncio de Telefónica de entrar en la compañía
Telecom Italia a mediados de noviembre. Explicó que la adoptó
luego que se difundieran declaraciones de “directivos de Telefónica
en ocasión de la Expocom 2007 donde admitían su participación
dentro de Telecom”.

Telefónica y Telecom Italia son los operadores responsables de Telefónica
de Argentina y de Telecom Argentina, en un mercado “privatizado y regulado”,
explicó.

El Grupo Werthein, que posee 48 % de Nortel Inversora, uno de los propietarios
de Telecom Argentina (Telecom Italia tiene el 50% de las acciones), viene manifestando
su preocupación en torno de la irrupción de Telefónica
en Telecom Italia, lo que podría dar lugar a una posible modificación
en la estructura de control de en la filial de la Argentina.

La empresa de capitales españoles controlará junto con un consorcio
de empresas italianas el 17,99% de la filial italiana a través de Telco.

Esa circunstancia violaría no sólo la libre competencia, sino
también la ley por la cual se privatizó ENTEL en la década
del 90.

En concreto, Gerardo Werthein se presentó ante la Comisión Nacional
de Defensa de la Competencia (CNDC) para brindar un informe realizado por Carlos
Winograd. En ese estudio se contradice la posición presentada por Telecom
Italia.

Según la legislación vigente, Telefónica tendría
que afrontar trabas regulatorias porque la operación no debería
tener efecto en aquellos países en que ambas compañías
compiten entre sí, como es el caso de la Argentina.

La trama internacional

En seguida de haber obtenido luz verde en el mercado brasileño, el holding
de Telefónica anunció la adquisición del total del capital
de Olímpica a través de la sociedad italiana Telco que cuenta
con un share de 23,6% en el capital social con derecho a voto de Telecom Italia”.

Con el visto bueno del regulador brasileño de telecomunicaciones, Anatel,
Telefónica quedó autorizada a entrar en el capital de Telecom
Italia, dentro de los términos pactados con los socios italianos.

Telefónica y sus socios italianos -la aseguradora Generali, los bancos
Intesa Sanpaolo y Mediobanca, y Benetton- acaban de formalizar la comprar de
la sociedad Olimpia propietaria de 23,6% del capital de Telecom Italia por 4.161
millones de euros.

Una operación en bloques en la bolsa italiana, representativa de más
de un 5% del capital de Telecom Italia, apuntó ya directamente a la toma
de participación del holding participado por Telefónica.

Poco después, Pirelli confirmaba la venta de su participación
en Telecom Italia por un importe total de unos 4.200 millones de euros.

La confirmación de compra por parte de Telefónica se realizó
a través del comunicado a la CNMV. En él, la compañía
española de telecomunicaciones explicaba que junto a Generali, Mediobanca,
SanPaolo y Benetton, había adquirido “hoy, 25 de octubre de 2007,
la totalidad del capital de Olimpia a través de la sociedad italiana,
Telco, que cuenta con una participación de aproximadamente un 23,6% en
el capital social con derecho a voto de Telecom Italia”.

Los veedores designados por el gobierno en Telecom Argentina y se encuentran
analizando si el ingreso de Telefónica en Telecom Italia podría
afectar al mercado local y favorecer un monopolio en el sector son Marcelo Goldberg,
de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), y Guillermo
Banegas, de la Comisión Nacional de Comunicaciones.

El grupo de asociaciones de defensa del consumidor con apoyo internacional
que se presentó ante la CNDC y solicitó que “se determine
si la transacción celebrada en el exterior, por la cual Telefónica
de España adquiere una importante participación accionaria en
las sociedades que controlan Telecom Italia, afecta o transgrede las normas
de defensa de la competencia”.

El pedido fue realizado por Consumidores Argentinos, Procurar, Proconsumer,
Unión de Consumidores de Argentina y Cruzada Cívica, todas integrantes
del Registro Nacional de Asociaciones de Consumidores (RNAC), con el expreso
apoyo de un grupo de entidades de España y de América latina y
de Consumers International, única organización que agrupa a más
de 220 asociaciones en 115 países.

Brasil

También en Brasil, organismos estatales también están investigando
si la irrupción de la española viola ley de defensa de la competencia.

En este tercer lance entre inversores de Telecom todavía “no hay
señales de que la pelea entre los Werthein y sus socios italianos en
Telecom Argentina esté definida”.

En concreto se investiga la posibilidad de que el ingreso de Telefónica
modifique la estructura de control de Telecom Argentina y así viole no
sólo la libre competencia, sino también la ley por la que se privatizó
ENTEL. Para los Werthein, la operación daría lugar a esa modificación,
y así lo habían señalado en una carta enviada a la Bolsa
semanas atrás.

Para los italianos, no habría tal incidencia, y ésa es la posición
que adoptó la compañía oficialmente a través de
su directorio en sendos comunicados a la Bolsa.

En uno de los seminarios de Expo Comm 2007, Carlos Felices, titular de la empresa
del Grupo Werthein y Telecom Italia, reclamó un marco normativo que “facilite
la convergencia que están pidiendo los consumidores” y permita a
las telefónicas dar servicios de triple play (televisión, Internet
y telefonía).

“Hay regulaciones que nos inhiben y esperemos que, una vez pasadas las
elecciones, el tema se vuelva a analizar. Confiamos en que el año próximo
vamos a poder dar televisión por la red, porque Internet es un tsunami
imparable”, aseguró Felices.

“Por supuesto -continuó el directivo- no vamos a hacer nada que
la regulación nos impida. Hoy estamos trabajando para estar listos cuando
llegue el momento y no tenemos pensado asociarnos a ningún operador de
cable para poner un pie en el negocio”.

Alejandro Pinedo, secretario general del grupo Telefónica, destacó
que “hay compartimientos estancos que retrasan la convergencia y no sirven
para lo que está pidiendo el usuario”. “Debemos evaluar nuevos
modelos de mercados -insistió-. Hay un rumbo de integración digital
y nadie debería quedar afuera. El marco actual no es idóneo y
los consumidores son indiferentes al medio por el cual les llegan los servicios.”
“Necesitamos políticas regulatorias simétricas y eficientes
para asegurar la comunicación”, aseguró.

Los ejecutivos habían realizado este reclamo luego de participar en
el panel sobre La Visión de los CEOs de telecomunicaciones en Expocomm,
la exposición de tecnología y telecomunicaciones más importante
del sector.

El director general de Relaciones Institucionales de Telefónica, José
Luis Rodríguez Zarco, insistió en que la compra no impacta en
la Argentina. “Prueba de ello es que fue aprobada en la Unión Europea”,
manifestó.

Tras una década de haber sido desmembrado el monopolio estatal en las telecomunicaciones,
el gobierno analiza ahora si, por la vía privada internacional, la absorción
de Telecom por parte de Telefónica implica el regreso de esa hegemonía
erradicada en la telefonía básica y celular que ambas se reparten
en la Argentina.

Para ello, el ministro de Planificación, Julio de Vido, designó
dos veedores para empresas telefónicas luego de que entidades de defensa
de consumidores se movilizaran manifestando su preocupación por posibles
prácticas monopólicas, inmanentes de la fusión global.

La acción de las ligas de usuarios se produjo después de la controversia
que surgiera en el directorio de Telecom entre la parte italiana y la representación
del grupo local Werthein, que adquiriera el 48 % de la sociedad que controla
la operadora de una zona de la telefonía básica nacional, Nortel,
que se ventiló por medio de notas y aclaraciones ante la Bolsa de Comercio
sobre los efectos que el negocio internacional de absorción tendría
en la gestión de la firma en el país.

Mientras los directores de origen europeo adujeron que la compra de Telecom
por parte de Telefónica (a través de su subsidiaria Olimpia) y
el ingreso en el directorio de Telecom Italia no implicaría la toma de
posesión de la compañía en la Argentina, el grupo Werthein
insistió en someter el negocio a la salvaguarda estatal, lo cual se logró
a partir de la presión de los consumidores, que, además de contar
con el beneplácito del gobierno y del socio local, ofició de paraguas
para la intervención.

Así, los dos veedores ya trabajan dentro de Telecom Argentina, y en
el plazo de dos meses deberán informar sobre la operación a la
Comisión de Defensa de la Competencia y a la Comisión Nacional
de Comunicaciones.

En conferencia de prensa, De Vido, había asegurado que la decisión
se tomaba ante el anuncio de Telefónica de entrar en la compañía
Telecom Italia a mediados de noviembre. Explicó que la adoptó
luego que se difundieran declaraciones de “directivos de Telefónica
en ocasión de la Expocom 2007 donde admitían su participación
dentro de Telecom”.

Telefónica y Telecom Italia son los operadores responsables de Telefónica
de Argentina y de Telecom Argentina, en un mercado “privatizado y regulado”,
explicó.

El Grupo Werthein, que posee 48 % de Nortel Inversora, uno de los propietarios
de Telecom Argentina (Telecom Italia tiene el 50% de las acciones), viene manifestando
su preocupación en torno de la irrupción de Telefónica
en Telecom Italia, lo que podría dar lugar a una posible modificación
en la estructura de control de en la filial de la Argentina.

La empresa de capitales españoles controlará junto con un consorcio
de empresas italianas el 17,99% de la filial italiana a través de Telco.

Esa circunstancia violaría no sólo la libre competencia, sino
también la ley por la cual se privatizó ENTEL en la década
del 90.

En concreto, Gerardo Werthein se presentó ante la Comisión Nacional
de Defensa de la Competencia (CNDC) para brindar un informe realizado por Carlos
Winograd. En ese estudio se contradice la posición presentada por Telecom
Italia.

Según la legislación vigente, Telefónica tendría
que afrontar trabas regulatorias porque la operación no debería
tener efecto en aquellos países en que ambas compañías
compiten entre sí, como es el caso de la Argentina.

La trama internacional

En seguida de haber obtenido luz verde en el mercado brasileño, el holding
de Telefónica anunció la adquisición del total del capital
de Olímpica a través de la sociedad italiana Telco que cuenta
con un share de 23,6% en el capital social con derecho a voto de Telecom Italia”.

Con el visto bueno del regulador brasileño de telecomunicaciones, Anatel,
Telefónica quedó autorizada a entrar en el capital de Telecom
Italia, dentro de los términos pactados con los socios italianos.

Telefónica y sus socios italianos -la aseguradora Generali, los bancos
Intesa Sanpaolo y Mediobanca, y Benetton- acaban de formalizar la comprar de
la sociedad Olimpia propietaria de 23,6% del capital de Telecom Italia por 4.161
millones de euros.

Una operación en bloques en la bolsa italiana, representativa de más
de un 5% del capital de Telecom Italia, apuntó ya directamente a la toma
de participación del holding participado por Telefónica.

Poco después, Pirelli confirmaba la venta de su participación
en Telecom Italia por un importe total de unos 4.200 millones de euros.

La confirmación de compra por parte de Telefónica se realizó
a través del comunicado a la CNMV. En él, la compañía
española de telecomunicaciones explicaba que junto a Generali, Mediobanca,
SanPaolo y Benetton, había adquirido “hoy, 25 de octubre de 2007,
la totalidad del capital de Olimpia a través de la sociedad italiana,
Telco, que cuenta con una participación de aproximadamente un 23,6% en
el capital social con derecho a voto de Telecom Italia”.

Los veedores designados por el gobierno en Telecom Argentina y se encuentran
analizando si el ingreso de Telefónica en Telecom Italia podría
afectar al mercado local y favorecer un monopolio en el sector son Marcelo Goldberg,
de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC), y Guillermo
Banegas, de la Comisión Nacional de Comunicaciones.

El grupo de asociaciones de defensa del consumidor con apoyo internacional
que se presentó ante la CNDC y solicitó que “se determine
si la transacción celebrada en el exterior, por la cual Telefónica
de España adquiere una importante participación accionaria en
las sociedades que controlan Telecom Italia, afecta o transgrede las normas
de defensa de la competencia”.

El pedido fue realizado por Consumidores Argentinos, Procurar, Proconsumer,
Unión de Consumidores de Argentina y Cruzada Cívica, todas integrantes
del Registro Nacional de Asociaciones de Consumidores (RNAC), con el expreso
apoyo de un grupo de entidades de España y de América latina y
de Consumers International, única organización que agrupa a más
de 220 asociaciones en 115 países.

Brasil

También en Brasil, organismos estatales también están investigando
si la irrupción de la española viola ley de defensa de la competencia.

En este tercer lance entre inversores de Telecom todavía “no hay
señales de que la pelea entre los Werthein y sus socios italianos en
Telecom Argentina esté definida”.

En concreto se investiga la posibilidad de que el ingreso de Telefónica
modifique la estructura de control de Telecom Argentina y así viole no
sólo la libre competencia, sino también la ley por la que se privatizó
ENTEL. Para los Werthein, la operación daría lugar a esa modificación,
y así lo habían señalado en una carta enviada a la Bolsa
semanas atrás.

Para los italianos, no habría tal incidencia, y ésa es la posición
que adoptó la compañía oficialmente a través de
su directorio en sendos comunicados a la Bolsa.

En uno de los seminarios de Expo Comm 2007, Carlos Felices, titular de la empresa
del Grupo Werthein y Telecom Italia, reclamó un marco normativo que “facilite
la convergencia que están pidiendo los consumidores” y permita a
las telefónicas dar servicios de triple play (televisión, Internet
y telefonía).

“Hay regulaciones que nos inhiben y esperemos que, una vez pasadas las
elecciones, el tema se vuelva a analizar. Confiamos en que el año próximo
vamos a poder dar televisión por la red, porque Internet es un tsunami
imparable”, aseguró Felices.

“Por supuesto -continuó el directivo- no vamos a hacer nada que
la regulación nos impida. Hoy estamos trabajando para estar listos cuando
llegue el momento y no tenemos pensado asociarnos a ningún operador de
cable para poner un pie en el negocio”.

Alejandro Pinedo, secretario general del grupo Telefónica, destacó
que “hay compartimientos estancos que retrasan la convergencia y no sirven
para lo que está pidiendo el usuario”. “Debemos evaluar nuevos
modelos de mercados -insistió-. Hay un rumbo de integración digital
y nadie debería quedar afuera. El marco actual no es idóneo y
los consumidores son indiferentes al medio por el cual les llegan los servicios.”
“Necesitamos políticas regulatorias simétricas y eficientes
para asegurar la comunicación”, aseguró.

Los ejecutivos habían realizado este reclamo luego de participar en
el panel sobre La Visión de los CEOs de telecomunicaciones en Expocomm,
la exposición de tecnología y telecomunicaciones más importante
del sector.

El director general de Relaciones Institucionales de Telefónica, José
Luis Rodríguez Zarco, insistió en que la compra no impacta en
la Argentina. “Prueba de ello es que fue aprobada en la Unión Europea”,
manifestó.

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