El Frepaso está virtualmente fracturado

Los 22 miembros del bloque quedaron divididos en tres sectores y envueltos en un clima de incertidumbre respecto de su futuro.

1 noviembre, 2001

(NA). – El bloque del Frepaso quedó virtualmente fracturado luego de que el titular de esa bancada, Darío Alessandro, decidió desoir el mandato de la mayoría de sus legisladores de tomar distancia del Gobierno nacional y adquirir autonomía de sus socios radicales.

Voceros de Alessandro dieron ayer por la tarde la voz de ruptura tras una reunión en la que se volvió a retomar el debate que en la noche del martes había puesto a la bancada al borde de la fractura.

Ahora, los 22 miembros del Frepaso quedaron divididos en tres sectores y envueltos en la incertidumbre sobre si definitivamente los frentistas terminarán divididos en dos bancadas o si Alessandro y su grupo de seguidores se terminarán integrando con los díscolos.

Por lo pronto, junto al hasta ahora titular de la bancada se encolumnarán Rodolfo Rodil, Cristina Zuccardi, Alberto Briozzo y Juan Miguel Gariglio.

En la vereda de enfrente quedó una amplia mayoría integrada por Rafael Flores, Marta Argul, Bárbara Espínola, Isabel Foco, María América González, Irma Parentella, Alejandro Peyrou, Carlos Raimundi, Atilio Tazzioli, Ricardo Vago, José Vitar, Humberto Volando, Pablo Fernández, Fernando Melillo y Federico Sóñez.

Este grupo era el que venía pugnando por separarse de la Alianza y formar un bloque propio y el que impuso su decisión en las reuniones de anoche y de este mediodía, que Alessandro y otros cuatro legisladores decidieron no acatar.

Se impusieron así por sobre la teoría de Alessandro y Rodil que pretendían mantener la alianza con el radicalismo a partir de la apuesta de armar un “frente progresista” con los diputados críticos de la UCR que asumirán sus bancas en diciembre próximo.

Lejos de comulgar con esta idea, los díscolos manifestaron su “hartazgo” ante el costo político que el Frepaso venía pagando por “este juego de indefiniciones en el que no somos opositores ni oficialistas y recibimos los palos de todos lados”, indicaron.

La discusión se saldó con una votación en la que claramente 15 legisladores impusieron su criterio y dejaron en minoría a la conducción encarnada por Alessandro.

Los rebeldes se fueron de la reunión de ayer al mediodía convencidos que la ruptura con la UCR era un hecho, pero se desayunaron pocas horas después con que Alessandro y Rodil no iban a acatar la medida y que serían seguidos en esa conducta por los flamariquistas Zuccardi y Briozzo.

La comunicación llegó por vía de voceros del titular de la bancada que anticiparon que el jefe de bancada no iba a hacer declaraciones, pero dieron por un hecho la fractura del bloque. Esto provocó la reacción de los díscolos que salieron a ratificar la decisión de separarse del radicalismo como “una postura adoptada por la mayoría de los diputados”, como afirmó Flores.

Otro que también destacó el hecho de que la decisión de romper la Alianza se impuso en el bloque fue Melillo, quien dijo que “hay bloque autónomo porque la decisión de la mayoría fue ésa”. Es más, afirmó que los díscolos “queríamos bloque autónomo con Darío Alessandro a la cabeza”, y se lamentó porque no se hubiera avanzado en ese camino.

Esta postura quedó plasmada en un comunicado de prensa en el que se informa la decisión “orgánica de recuperar autonomía del Gobierno nacional y, por lo tanto, dejar de formar parte de la bancada oficialista”.

Sin embargo, la fractura todavía no está decidida ya que, de hecho, algunos legisladores se mostraron optimistas en la posibilidad de convencer a Alessandro de que cumpla con la
decisión de la mayoría.

Una vez cerradas esas gestiones se sabrá quién se quedará con el nombre de Frepaso, aunque algunos díscolos ya especulaban con denominar al nuevo bloque como Frente Grande, ya que será la única fuerza que integre el grupo luego del abandondo del PSP.

(NA). – El bloque del Frepaso quedó virtualmente fracturado luego de que el titular de esa bancada, Darío Alessandro, decidió desoir el mandato de la mayoría de sus legisladores de tomar distancia del Gobierno nacional y adquirir autonomía de sus socios radicales.

Voceros de Alessandro dieron ayer por la tarde la voz de ruptura tras una reunión en la que se volvió a retomar el debate que en la noche del martes había puesto a la bancada al borde de la fractura.

Ahora, los 22 miembros del Frepaso quedaron divididos en tres sectores y envueltos en la incertidumbre sobre si definitivamente los frentistas terminarán divididos en dos bancadas o si Alessandro y su grupo de seguidores se terminarán integrando con los díscolos.

Por lo pronto, junto al hasta ahora titular de la bancada se encolumnarán Rodolfo Rodil, Cristina Zuccardi, Alberto Briozzo y Juan Miguel Gariglio.

En la vereda de enfrente quedó una amplia mayoría integrada por Rafael Flores, Marta Argul, Bárbara Espínola, Isabel Foco, María América González, Irma Parentella, Alejandro Peyrou, Carlos Raimundi, Atilio Tazzioli, Ricardo Vago, José Vitar, Humberto Volando, Pablo Fernández, Fernando Melillo y Federico Sóñez.

Este grupo era el que venía pugnando por separarse de la Alianza y formar un bloque propio y el que impuso su decisión en las reuniones de anoche y de este mediodía, que Alessandro y otros cuatro legisladores decidieron no acatar.

Se impusieron así por sobre la teoría de Alessandro y Rodil que pretendían mantener la alianza con el radicalismo a partir de la apuesta de armar un “frente progresista” con los diputados críticos de la UCR que asumirán sus bancas en diciembre próximo.

Lejos de comulgar con esta idea, los díscolos manifestaron su “hartazgo” ante el costo político que el Frepaso venía pagando por “este juego de indefiniciones en el que no somos opositores ni oficialistas y recibimos los palos de todos lados”, indicaron.

La discusión se saldó con una votación en la que claramente 15 legisladores impusieron su criterio y dejaron en minoría a la conducción encarnada por Alessandro.

Los rebeldes se fueron de la reunión de ayer al mediodía convencidos que la ruptura con la UCR era un hecho, pero se desayunaron pocas horas después con que Alessandro y Rodil no iban a acatar la medida y que serían seguidos en esa conducta por los flamariquistas Zuccardi y Briozzo.

La comunicación llegó por vía de voceros del titular de la bancada que anticiparon que el jefe de bancada no iba a hacer declaraciones, pero dieron por un hecho la fractura del bloque. Esto provocó la reacción de los díscolos que salieron a ratificar la decisión de separarse del radicalismo como “una postura adoptada por la mayoría de los diputados”, como afirmó Flores.

Otro que también destacó el hecho de que la decisión de romper la Alianza se impuso en el bloque fue Melillo, quien dijo que “hay bloque autónomo porque la decisión de la mayoría fue ésa”. Es más, afirmó que los díscolos “queríamos bloque autónomo con Darío Alessandro a la cabeza”, y se lamentó porque no se hubiera avanzado en ese camino.

Esta postura quedó plasmada en un comunicado de prensa en el que se informa la decisión “orgánica de recuperar autonomía del Gobierno nacional y, por lo tanto, dejar de formar parte de la bancada oficialista”.

Sin embargo, la fractura todavía no está decidida ya que, de hecho, algunos legisladores se mostraron optimistas en la posibilidad de convencer a Alessandro de que cumpla con la
decisión de la mayoría.

Una vez cerradas esas gestiones se sabrá quién se quedará con el nombre de Frepaso, aunque algunos díscolos ya especulaban con denominar al nuevo bloque como Frente Grande, ya que será la única fuerza que integre el grupo luego del abandondo del PSP.

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