El campo reclama intensificar los controles sanitarios

Las entidades agropecuarias solicitaron al Gobierno que refuerce el control sanitario de la hacienda para evitar que reaparezca la aftosa. Comienza la época de mayor movimiento de ganado. Dicen que la situación es delicada.

8 enero, 2001

La previsión de un intenso movimiento de ganado en los próximos meses, motivó el reclamo de un mayor refuerzo de los controles sanitarios por parte de las entidades agropecuarias.

Como es habitual en esta época del año, la hacienda del norte del país viaja hacia los campos de invernada situados en la pampa húmeda.

Las estadísticas hablan de unos 300.000 terneros provenientes principalmente de Formosa que año tras año hacen ese periplo.

“Estamos muy preocupados y pedimos que se extremen los controles porque de ocurrir algo, sería un desastre”, explicó con inquietud Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria Argentina.

El miércoles pasado, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria convocó a las cuatro principales entidades del campo para formar un grupo de trabajo.

En el transcurso del año próximo pasado, la Argentina logró ganar el status sanitario de “país libre de aftosa sin vacunación”.

e
En agosto último corrió serios riesgos cuando se detectó la presencia del virus entre un grupo de animales supuestamente contrabandeados desde Paraguay.

Hace poco más de una semana atrás, una luz de alarma se encendió en la provincia de Entre Ríos. Varios productores y hasta el gobernador Sergio Montiel denunciaron la presencia de ganado infectado con aftosa proveniente de Formosa.

Inmediatamente, el Senasa negó categóricamente la presencia del virus e informó que se habían detectado “garrapatas”.

En las últimas horas el Servicio de Sanidad y Calidad Agroalimentaria, anunció que impondrá una cuarentena de la hacienda formoseña antes de ser despachada.

Así lo adelantó Ricardo Buryaile, presidente de Confederación de Asociaciones Rurales de Chaco y Formosa , a partir del diálogo que mantuvo con el vicepresidente del Senasa, Eduardo Greco.

Explicó Buryaile que durante ese período de cuarentena ,que tendrá una duración de un mes, la hacienda comercializable será vigilada por técnicos del Senasa, quienes se encargarán, además, de proveerle del sistema de identificación con “caravanas”.

La previsión de un intenso movimiento de ganado en los próximos meses, motivó el reclamo de un mayor refuerzo de los controles sanitarios por parte de las entidades agropecuarias.

Como es habitual en esta época del año, la hacienda del norte del país viaja hacia los campos de invernada situados en la pampa húmeda.

Las estadísticas hablan de unos 300.000 terneros provenientes principalmente de Formosa que año tras año hacen ese periplo.

“Estamos muy preocupados y pedimos que se extremen los controles porque de ocurrir algo, sería un desastre”, explicó con inquietud Eduardo Buzzi, presidente de la Federación Agraria Argentina.

El miércoles pasado, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria convocó a las cuatro principales entidades del campo para formar un grupo de trabajo.

En el transcurso del año próximo pasado, la Argentina logró ganar el status sanitario de “país libre de aftosa sin vacunación”.

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En agosto último corrió serios riesgos cuando se detectó la presencia del virus entre un grupo de animales supuestamente contrabandeados desde Paraguay.

Hace poco más de una semana atrás, una luz de alarma se encendió en la provincia de Entre Ríos. Varios productores y hasta el gobernador Sergio Montiel denunciaron la presencia de ganado infectado con aftosa proveniente de Formosa.

Inmediatamente, el Senasa negó categóricamente la presencia del virus e informó que se habían detectado “garrapatas”.

En las últimas horas el Servicio de Sanidad y Calidad Agroalimentaria, anunció que impondrá una cuarentena de la hacienda formoseña antes de ser despachada.

Así lo adelantó Ricardo Buryaile, presidente de Confederación de Asociaciones Rurales de Chaco y Formosa , a partir del diálogo que mantuvo con el vicepresidente del Senasa, Eduardo Greco.

Explicó Buryaile que durante ese período de cuarentena ,que tendrá una duración de un mes, la hacienda comercializable será vigilada por técnicos del Senasa, quienes se encargarán, además, de proveerle del sistema de identificación con “caravanas”.

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