Diputado de Cavallo en aprietos
Alfredo Castañón, nuevo jefe del bloque de Acción por la República, está procesado por fraude al Estado y está a un paso de ir a juicio oral y público.
(DYN).- El diputado nacional Alfredo Castañón, flamante jefe del bloque de Acción por la República (AR), afronta un proceso penal por “administración infiel” en perjuicio del Estado y ya existe un requerimiento de la fiscalía federal para que sea sometido a juicio oral y público.
La información fue suministrada a DYN por fuentes judiciales que afirmaron que, antes de la sanción de la nueva ley de fueros aprobada en medio del escándalo por las presuntas coimas a senadores, Castañón había expresado que estaba dispuesto a renunciar a su inmunidad procesal para declarar en el juicio.
La Cámara Federal porteña, que confirmó el procesamiento que dictó a Castañón el juez federal Adolfo Bagnasco, sindicó al diputado cavallista como presunto coautor de una maniobra para favorecer a las empresas privadas Sadia Constructora y Gabriel & Cía., contratadas para brindar servicios a Encotesa pese a que otras compañías ofrecían mejores precios y antecedentes.
Es que Castañón, un abogado que asumió como diputado nacional a través de la agrupación creada por Domingo Cavallo, era director de Encotesa –la ex empresa estatal de correos– cuando fue firmado el contrato con Sadia, por $ 7.082.783,20, y cuando se concretó la operación con la sociedad Gabriel, por $ 106.200.
Los dos contratos fueron “ajenos al sentido común” no sólo por la oferta de precios superaba a la de otras empresas sino también porque ninguna de las compañías a las que el Correo confió tareas de distribución y ensobrado de correspondencia “tenía por objeto social la actividad encargada por Encotesa”, subrayó la Cámara Federal en una resolución.
Esta semana Castañón fue designado jefe del bloque de Acción por la República en la cámara baja, en reemplazo del también abogado Guillermo Francos, que renunció a su banca disgustado por la trama de sospechas en la que han quedado atrapados al menos 11 senadores nacionales que habrían aceptado engrosar sus cuentas a cambio de votar en favor de la ley de reforma laboral.
(DYN).- El diputado nacional Alfredo Castañón, flamante jefe del bloque de Acción por la República (AR), afronta un proceso penal por “administración infiel” en perjuicio del Estado y ya existe un requerimiento de la fiscalía federal para que sea sometido a juicio oral y público.
La información fue suministrada a DYN por fuentes judiciales que afirmaron que, antes de la sanción de la nueva ley de fueros aprobada en medio del escándalo por las presuntas coimas a senadores, Castañón había expresado que estaba dispuesto a renunciar a su inmunidad procesal para declarar en el juicio.
La Cámara Federal porteña, que confirmó el procesamiento que dictó a Castañón el juez federal Adolfo Bagnasco, sindicó al diputado cavallista como presunto coautor de una maniobra para favorecer a las empresas privadas Sadia Constructora y Gabriel & Cía., contratadas para brindar servicios a Encotesa pese a que otras compañías ofrecían mejores precios y antecedentes.
Es que Castañón, un abogado que asumió como diputado nacional a través de la agrupación creada por Domingo Cavallo, era director de Encotesa –la ex empresa estatal de correos– cuando fue firmado el contrato con Sadia, por $ 7.082.783,20, y cuando se concretó la operación con la sociedad Gabriel, por $ 106.200.
Los dos contratos fueron “ajenos al sentido común” no sólo por la oferta de precios superaba a la de otras empresas sino también porque ninguna de las compañías a las que el Correo confió tareas de distribución y ensobrado de correspondencia “tenía por objeto social la actividad encargada por Encotesa”, subrayó la Cámara Federal en una resolución.
Esta semana Castañón fue designado jefe del bloque de Acción por la República en la cámara baja, en reemplazo del también abogado Guillermo Francos, que renunció a su banca disgustado por la trama de sospechas en la que han quedado atrapados al menos 11 senadores nacionales que habrían aceptado engrosar sus cuentas a cambio de votar en favor de la ley de reforma laboral.
