Desregulación de obras sociales
El ministro de Salud, Héctor Lombardo, ratificó el plan para modificar el sistema.
(DyN) – El ministro de Salud, Héctor Lombardo, ratificó el martes que el Gobierno trabaja en una modificación del sistema de obras sociales tendiente a evitar el desfinanciamiento que soportan algunos institutos como consecuencia del traspaso de afiliados.
“La gente de mayor ingreso se fue a otras obras sociales” sostuvo Lombardo, quien señaló que el desfinanciamiento que produjo esa migración de afiliados “lo tenemos que evitar con una redistribución solidaria de los ingresos”. El ministro de Salud señaló que “estamos trabajando en todo este proyecto de reformulación” del sistema.
El viernes pasado, el jefe de asesores del Ministerio de Economía, Pablo Gerchunoff, adelantó que el proyecto de reforma del sistema de obras sociales prevé que el trabajador que abandone su prestación original, deberá dejar una porción de su aporte en la obra social de la que emigra.
Gerchunoff sostuvo que la reforma que está elaborando el Gobierno “se basa en dos principios básicos: experimentar la posibilidad de la libre elección y aumentar la solidaridad del sistema”.
El tema de la salud cobra especial interés para el gobierno porque algunos números que maneja la administración De la Rúa indican que existen en la Argentina por lo menos 12 millones de personas sin cobertura médica y que necesariamente buscan atención en el hospital público.
El superintendente de Salud, Rubén Cano, sostuvo el martes que buscamos hacer más eficiente el sistema tratando de bajar costos a través de la eliminación en la intermediación de la salud y de esa forma también restarle demanda al hospital público”. Cano, en declaraciones al programa Ida y Vuelta, resaltó que con la derivación de casi un millón de monotributistas al sistema de obras sociales se ha logrado bajar una presión de demanda del hospital público”.
(DyN) – El ministro de Salud, Héctor Lombardo, ratificó el martes que el Gobierno trabaja en una modificación del sistema de obras sociales tendiente a evitar el desfinanciamiento que soportan algunos institutos como consecuencia del traspaso de afiliados.
“La gente de mayor ingreso se fue a otras obras sociales” sostuvo Lombardo, quien señaló que el desfinanciamiento que produjo esa migración de afiliados “lo tenemos que evitar con una redistribución solidaria de los ingresos”. El ministro de Salud señaló que “estamos trabajando en todo este proyecto de reformulación” del sistema.
El viernes pasado, el jefe de asesores del Ministerio de Economía, Pablo Gerchunoff, adelantó que el proyecto de reforma del sistema de obras sociales prevé que el trabajador que abandone su prestación original, deberá dejar una porción de su aporte en la obra social de la que emigra.
Gerchunoff sostuvo que la reforma que está elaborando el Gobierno “se basa en dos principios básicos: experimentar la posibilidad de la libre elección y aumentar la solidaridad del sistema”.
El tema de la salud cobra especial interés para el gobierno porque algunos números que maneja la administración De la Rúa indican que existen en la Argentina por lo menos 12 millones de personas sin cobertura médica y que necesariamente buscan atención en el hospital público.
El superintendente de Salud, Rubén Cano, sostuvo el martes que buscamos hacer más eficiente el sistema tratando de bajar costos a través de la eliminación en la intermediación de la salud y de esa forma también restarle demanda al hospital público”. Cano, en declaraciones al programa Ida y Vuelta, resaltó que con la derivación de casi un millón de monotributistas al sistema de obras sociales se ha logrado bajar una presión de demanda del hospital público”.
