De la Rúa denuncia campaña
El presidente afirmó que se ha puesto en juego una campaña en contra del gobierno promovida desde sectores que han perdido de capacidad de "hacer negocios".
Fernando de la Rúa, denunció que su Gobierno es víctima de una campaña lanzada desde sectores que ya no pueden hacer “negocios fáciles” con el Estado. “Estamos tocando muchos intereses”, afirmó el primer mandatario—.
De la Rúa respondió a unas críticas que recibió en las últimas semanas por una supuesta inacción frente a la crisis de recesión que soporta la economía. “He tomado decisiones muy fuertes, porque nadie se hubiese animado a desregular las telecomunicaciones”, replicó el presidente, quien llamó a vencer a los derrotistas, a quienes siembren pesimismo.
En concordancia con las declaraciones realizadas por funcionarios del FMI, opinó que el mayor problema de los argentinos tiene raíz en una crisis de confianza, más que en los indicadores puros de la economía.
De la Rúa también aprovechó la oportunidad para desligar a su gobierno de las denuncias sobre el presunto pago de sobornos a senadores a cambio de la aprobación de la reforma laboral impulsada por el Ministerio de Trabajo.
“No hay ningún encubrimiento de parte nuestra. Del Gobierno no salió ningún aporte para ninguna ley”, enfatizó, respondiendo, de alguna manera, al ex presidente Menem, quien -con ironía- había señalado ayer que los sobornos no los debe haber pagado Caritas.
Fernando de la Rúa, denunció que su Gobierno es víctima de una campaña lanzada desde sectores que ya no pueden hacer “negocios fáciles” con el Estado. “Estamos tocando muchos intereses”, afirmó el primer mandatario—.
De la Rúa respondió a unas críticas que recibió en las últimas semanas por una supuesta inacción frente a la crisis de recesión que soporta la economía. “He tomado decisiones muy fuertes, porque nadie se hubiese animado a desregular las telecomunicaciones”, replicó el presidente, quien llamó a vencer a los derrotistas, a quienes siembren pesimismo.
En concordancia con las declaraciones realizadas por funcionarios del FMI, opinó que el mayor problema de los argentinos tiene raíz en una crisis de confianza, más que en los indicadores puros de la economía.
De la Rúa también aprovechó la oportunidad para desligar a su gobierno de las denuncias sobre el presunto pago de sobornos a senadores a cambio de la aprobación de la reforma laboral impulsada por el Ministerio de Trabajo.
“No hay ningún encubrimiento de parte nuestra. Del Gobierno no salió ningún aporte para ninguna ley”, enfatizó, respondiendo, de alguna manera, al ex presidente Menem, quien -con ironía- había señalado ayer que los sobornos no los debe haber pagado Caritas.
