Conclusiones al cierre de CIETT 2001

El viernes finalizó el congreso internacional de empresas de trabajo temporario, en el cual se analizó el estado en que actualmente se encuentra la actividad en el marco económico mundial. Por Gabriel Marrapodi

22 mayo, 2001

Luego de tres días de disertaciones en las que la discusión y el intercambio de experiencias y visiones de los diferentes protagonistas del ámbito del empleo en todo el mundo, la Confederación Internacional de Empresas de Trabajo Temporario (CIETT) cerró en Buenos Aires la edición 2001 del congreso internacional de esta actividad.

Durante las jornadas, y según la Federación Argentina de Empresas de Trabajo Temporario (FAETT), se arrojaron conclusiones interesantes que se espera puedan ser capitalizadas a la brevedad para ayudar en la actual coyuntura de la Argentina en la lucha contra el desempleo.

El congreso contó con la participación de la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, quien expuso las políticas del Gobierno en cuanto a la fomentación de esta modalidad de empleo, además de recibir críticas y debatir con varios especialistas el estado del empleo en la Argentina y el rol que las empresas de trabajo temporario juegan en él.

En cuanto a las conslusiones arrojadas por el congreso, para el presidente de FAETT, Horacio de Martini, “debemos mancomunar esfuerzos para sumar herramientas que impulsen la creación de nuevos puestos de trabajo. En este sentido, la experiencia de nuestros colegas de países con mayor grado de desarrollo, tasas óptimas de empleo, y menores barreras burocráticas, serán de gran ayuda en la actual coyuntura local”.

En este sentido, y según datos del Indec, mientras el crecimiento del PBI de la Argentina en 2000 fue nulo, el crecimiento del empleo a través de empresas de trabajo temporario fue de 3,52%.

Asimismo, la FAETT destacó que en la Argentina son aproximadamente 48.100 las personas que trabajan bajo esta modalidad y que representan 0,37% de la Población Económicamente Activa (PEA).

Durante 2000 se devengaron más de $ 294 millones en salarios correspondientes a personas ocupadas en las empresas de trabajo temporario del país. El total de salarios devengados el año pasado se incrementó en 26% con respecto a 1995, año en que la actividad cobró mayor difusión en la Argentina.

Las empresas de trabajo temporario que registraron una facturación superior a los $ 449 millones en 1995, incrementaron su facturación en 2000, llegando a superar los $ 481 millones, según datos de la FAETT.

Por su parte, en el plano internacional las realidades y contrastes del empleo en las diferentes regiones del mundo, también fueron tema de debate en esta conferencia.

En el caso de Europa, la consolidación de la Unión Europea generó el marco para que la CIETT, en representación de los intereses de la industria, intente a través del ejercicio de una legislación europea acerca de las empresas de trabajo temporario, un marco jurídico común para la actividad.

Según la entidad, es interesante ver el ejemplo europeo, en el que 15 países con idiomas e historias distintas se unieron bajo objetivos económicos y sociales conjuntos, contra el desempleo, y fomentan así la creación de empleos a través de todos los medios posibles.

Esto fue reconocido por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en los fundamentos de la resolución 181 sobre agencias privadas de empleo a la cual casi todos los países de América latina –incluida la Argentina– dieron su voto afirmativo en Ginebra, aunque por ahora pocos lo ratificaron con legislación específica.

En lo que respecta a las tendencias mundiales del empleo temporario, las conclusiones que arrojó el congreso indican que la actividad tiene diferentes grados de desarrollo de acuerdo a las condiciones de evolución económica y marco regulatorio en cada país.

En este sentido, si bien generalmente la población que trabaja en este tipo de empresas en el mundo tiene una mayoría de gente joven, en los países de América latina, donde existe un alto nivel de desempleo, se altera esta relación, y se observa que el rango de edades es sensiblemente mayor ubicándose el porcentaje mayoritario entre los 25 y 30 años.

Todos estos temas de fondo se analizarán y continuarán siendo objeto de debate en el próximo congreso anual de la CIETT, que se realizará en Tokio (Japón) en marzo de 2002.

Luego de tres días de disertaciones en las que la discusión y el intercambio de experiencias y visiones de los diferentes protagonistas del ámbito del empleo en todo el mundo, la Confederación Internacional de Empresas de Trabajo Temporario (CIETT) cerró en Buenos Aires la edición 2001 del congreso internacional de esta actividad.

Durante las jornadas, y según la Federación Argentina de Empresas de Trabajo Temporario (FAETT), se arrojaron conclusiones interesantes que se espera puedan ser capitalizadas a la brevedad para ayudar en la actual coyuntura de la Argentina en la lucha contra el desempleo.

El congreso contó con la participación de la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, quien expuso las políticas del Gobierno en cuanto a la fomentación de esta modalidad de empleo, además de recibir críticas y debatir con varios especialistas el estado del empleo en la Argentina y el rol que las empresas de trabajo temporario juegan en él.

En cuanto a las conslusiones arrojadas por el congreso, para el presidente de FAETT, Horacio de Martini, “debemos mancomunar esfuerzos para sumar herramientas que impulsen la creación de nuevos puestos de trabajo. En este sentido, la experiencia de nuestros colegas de países con mayor grado de desarrollo, tasas óptimas de empleo, y menores barreras burocráticas, serán de gran ayuda en la actual coyuntura local”.

En este sentido, y según datos del Indec, mientras el crecimiento del PBI de la Argentina en 2000 fue nulo, el crecimiento del empleo a través de empresas de trabajo temporario fue de 3,52%.

Asimismo, la FAETT destacó que en la Argentina son aproximadamente 48.100 las personas que trabajan bajo esta modalidad y que representan 0,37% de la Población Económicamente Activa (PEA).

Durante 2000 se devengaron más de $ 294 millones en salarios correspondientes a personas ocupadas en las empresas de trabajo temporario del país. El total de salarios devengados el año pasado se incrementó en 26% con respecto a 1995, año en que la actividad cobró mayor difusión en la Argentina.

Las empresas de trabajo temporario que registraron una facturación superior a los $ 449 millones en 1995, incrementaron su facturación en 2000, llegando a superar los $ 481 millones, según datos de la FAETT.

Por su parte, en el plano internacional las realidades y contrastes del empleo en las diferentes regiones del mundo, también fueron tema de debate en esta conferencia.

En el caso de Europa, la consolidación de la Unión Europea generó el marco para que la CIETT, en representación de los intereses de la industria, intente a través del ejercicio de una legislación europea acerca de las empresas de trabajo temporario, un marco jurídico común para la actividad.

Según la entidad, es interesante ver el ejemplo europeo, en el que 15 países con idiomas e historias distintas se unieron bajo objetivos económicos y sociales conjuntos, contra el desempleo, y fomentan así la creación de empleos a través de todos los medios posibles.

Esto fue reconocido por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en los fundamentos de la resolución 181 sobre agencias privadas de empleo a la cual casi todos los países de América latina –incluida la Argentina– dieron su voto afirmativo en Ginebra, aunque por ahora pocos lo ratificaron con legislación específica.

En lo que respecta a las tendencias mundiales del empleo temporario, las conclusiones que arrojó el congreso indican que la actividad tiene diferentes grados de desarrollo de acuerdo a las condiciones de evolución económica y marco regulatorio en cada país.

En este sentido, si bien generalmente la población que trabaja en este tipo de empresas en el mundo tiene una mayoría de gente joven, en los países de América latina, donde existe un alto nivel de desempleo, se altera esta relación, y se observa que el rango de edades es sensiblemente mayor ubicándose el porcentaje mayoritario entre los 25 y 30 años.

Todos estos temas de fondo se analizarán y continuarán siendo objeto de debate en el próximo congreso anual de la CIETT, que se realizará en Tokio (Japón) en marzo de 2002.

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