El tradicional frigorífico San Telmo-Sadowa, de Mar del Plata, que se dedicaba únicamente a la exportación de carnes, cerró definitivamente, a raíz de los perjuicios que le ocasionó la prohibición de ingreso de productos argentinos a los mercados internacionales.
Debido al cierre de esta empresa, 300 trabajadores quedaron sin empleo engrosando la abultada cifra de desocupados que registra la ciudad costera.
Cristian Shaefer, uno de los directivos de la empresa, lamentó el cierre del negocio de la exportación y dijo que los países cerraron sus puertas a las carnes nacionales “porque la Argentina mintió y no hizo bien los deberes”; “en este momento el país está pagando el altísimo costo de una pésima política sanitaria”, agregó.
Por su parte, el secretario de la Unión Obrera de la Carne, Pedro Montiel, opinó que “no es un problema empresarial sino una errática política la que ha llevado a este establecimiento a tomar tan drástica decisión. Esperemos que en otras partes del país no ocurra lo mismo”.
En medio de esta terrible crisis para el campo, la Sociedad Rural Argentina llamó a boicotear los productos europeos de todo tipo, en respuesta a la medida “unilateral” de la UE de cerrar su mercado a la carne nacional. “Llegó el momento de darles donde más les duele”, dijo Enrique Crotto, titular de la entidad.
Por su parte, la Comisión de Seguimiento y Control de las Investigaciones Judiciales del Partido Justicialista presentó una denuncia penal contra el ex secretario de Agricultura y Ganadería, Antonio Berhongaray, a quien acusa de incumplir los deberes de funcionario público.
El tradicional frigorífico San Telmo-Sadowa, de Mar del Plata, que se dedicaba únicamente a la exportación de carnes, cerró definitivamente, a raíz de los perjuicios que le ocasionó la prohibición de ingreso de productos argentinos a los mercados internacionales.
Debido al cierre de esta empresa, 300 trabajadores quedaron sin empleo engrosando la abultada cifra de desocupados que registra la ciudad costera.
Cristian Shaefer, uno de los directivos de la empresa, lamentó el cierre del negocio de la exportación y dijo que los países cerraron sus puertas a las carnes nacionales “porque la Argentina mintió y no hizo bien los deberes”; “en este momento el país está pagando el altísimo costo de una pésima política sanitaria”, agregó.
Por su parte, el secretario de la Unión Obrera de la Carne, Pedro Montiel, opinó que “no es un problema empresarial sino una errática política la que ha llevado a este establecimiento a tomar tan drástica decisión. Esperemos que en otras partes del país no ocurra lo mismo”.
En medio de esta terrible crisis para el campo, la Sociedad Rural Argentina llamó a boicotear los productos europeos de todo tipo, en respuesta a la medida “unilateral” de la UE de cerrar su mercado a la carne nacional. “Llegó el momento de darles donde más les duele”, dijo Enrique Crotto, titular de la entidad.
Por su parte, la Comisión de Seguimiento y Control de las Investigaciones Judiciales del Partido Justicialista presentó una denuncia penal contra el ex secretario de Agricultura y Ganadería, Antonio Berhongaray, a quien acusa de incumplir los deberes de funcionario público.