Chile: aumenta la tensión en las FF.AA.
Un general retirado señaló a Pinochet como responsable directo de los crímenes cometidos en la Caravana de la Muerte.
El general retirado Joaquín Lagos Osorio, ex jefe de la división Antofagasta del Ejército chileno, responsabilizó directamente a Augusto Pinochet por los crímenes cometidos por la “Caravana de la Muerte” acaecida en octubre de 1973.
En declaraciones a Televisión Nacional, el general Lagos afirmó que la comitiva militar presidida por el general Sergio Arellano Stark, que pasó por la zona de su jurisdicción, en los primeros días de octubre de 1973, asesinó a 14 prisioneros “a sus espaldas”, tras lo cual Pinochet le pidió que se responsabilizara de los crímenes.
De este modo, el general Lagos salió al paso de las declaraciones del ex gobernante militar, quien culpó a sus subordinados de dichas ejecuciones en el interrogatorio que le hizo el juez Juan Guzmán el martes pasado.
En esa declaración Pinochet reconoció que Arellano viajó como “delegado especial” suyo para “acelerar los procesos judiciales” de los presos políticos, pero negó haber ordenado fusilar gente y no entregar sus cuerpos.
El general Lagos fue el primer oficial en denunciar las atrocidades cometidas por la Caravana de la Muerte y pedir ,además, una investigación al respecto.
Asimismo, fue el único jefe de zona que entregó los cuerpos a sus familiares, aunque lo hizo en urnas selladas.
El caso de la Caravana de la Muerte, que dejó 75 víctimas a su paso, provocó el desafuero de Augusto Pinochet en agosto del año pasado por las “sospechas fundadas” de su participación en los crímenes.
Además, el fallo de la Corte Suprema autorizó su procesamiento por “secuestro calificado, homicidio, asociación ilícita e inhumación ilegal”.
El general retirado Joaquín Lagos Osorio, ex jefe de la división Antofagasta del Ejército chileno, responsabilizó directamente a Augusto Pinochet por los crímenes cometidos por la “Caravana de la Muerte” acaecida en octubre de 1973.
En declaraciones a Televisión Nacional, el general Lagos afirmó que la comitiva militar presidida por el general Sergio Arellano Stark, que pasó por la zona de su jurisdicción, en los primeros días de octubre de 1973, asesinó a 14 prisioneros “a sus espaldas”, tras lo cual Pinochet le pidió que se responsabilizara de los crímenes.
De este modo, el general Lagos salió al paso de las declaraciones del ex gobernante militar, quien culpó a sus subordinados de dichas ejecuciones en el interrogatorio que le hizo el juez Juan Guzmán el martes pasado.
En esa declaración Pinochet reconoció que Arellano viajó como “delegado especial” suyo para “acelerar los procesos judiciales” de los presos políticos, pero negó haber ordenado fusilar gente y no entregar sus cuerpos.
El general Lagos fue el primer oficial en denunciar las atrocidades cometidas por la Caravana de la Muerte y pedir ,además, una investigación al respecto.
Asimismo, fue el único jefe de zona que entregó los cuerpos a sus familiares, aunque lo hizo en urnas selladas.
El caso de la Caravana de la Muerte, que dejó 75 víctimas a su paso, provocó el desafuero de Augusto Pinochet en agosto del año pasado por las “sospechas fundadas” de su participación en los crímenes.
Además, el fallo de la Corte Suprema autorizó su procesamiento por “secuestro calificado, homicidio, asociación ilícita e inhumación ilegal”.
