Cayó la recaudación bonaerense
El ministro de Economía bonaerense dijo que la provincia cumplirá con el gasto previsto a pesar de que la recaudación cayó un 2,5%. Descartó la desactivación de programas sociales y pidió "un cambio de rumbo" al gobierno nacional.
Durante una entrevista concedida al diario La Nación, el titular de Hacienda de la provincia de Buenos Aires, Jorge Sarghini, advirtió que, “sin un cambio de rumbo por parte del gobierno nacional, no habrá mejoras en los ingresos bonaerenses” ,y adjudicó la principal responsabilidad de la caída tributaria “a las malas políticas del gobierno nacional, que prolongan la recesión”.
Las autoridades provinciales están preocupadas por el magro resultado de la recaudación de impuestos provinciales, que en términos globales cayó 2,5%respecto del último ejercicio (tomando el acumulado de los primeros diez meses).
Sarghini, que en estos días retoca los últimos detalles del presupuesto 2001 que enviará en dos semanas a la Legislatura provincial, insistió en afirmar que “no hay forma de resolver las cuestiones de orden fiscal si no se resuelve, previamente, la cuestión económica con una política diferente”.
El titular de la cartera económica aseguró que la provincia va a cumplir con el nivel de gastos previstos y que se mantendrán los programas sociales.
Sarghini también señaló que “se puede evaluar la posibilidad de tercerizar algunas de las tareas que son parte de la administración tributaria” y considera necesario “que ( a nivel nacional) haya un shock inducido, apoyado en medidas de corto plazo que generen una reactivación del mercado interno”.
El funcionario bonaerense se mostró en clara coincidencia con el programa de José Manuel de la Sota en Córdoba. “Si la propuesta sigue siendo aumentar impuestos y bajar gastos, en una economía estancada, esto trae más recesión y mantiene vigente el problema del déficit”, dijo.
“Las medidas de corto plazo de este nuevo enfoque son básicamente bajar impuestos, flexibilizar la política del Banco Central, diseñada para afrontar una crisis financiera como la del Tequila en 1995, para bajar la tasa de interés por esa vía, además de consensuar políticas antievasivas y en materia de comercio exterior”, consideró el ministro de economía de la provincia de Buenos Aires.
Todo ello será posible, según la visión del funcionario, “a partir de un fuerte acuerdo político para generar confianza interna, bajar costos y producir un cambio en las expectativas generales”.
Durante una entrevista concedida al diario La Nación, el titular de Hacienda de la provincia de Buenos Aires, Jorge Sarghini, advirtió que, “sin un cambio de rumbo por parte del gobierno nacional, no habrá mejoras en los ingresos bonaerenses” ,y adjudicó la principal responsabilidad de la caída tributaria “a las malas políticas del gobierno nacional, que prolongan la recesión”.
Las autoridades provinciales están preocupadas por el magro resultado de la recaudación de impuestos provinciales, que en términos globales cayó 2,5%respecto del último ejercicio (tomando el acumulado de los primeros diez meses).
Sarghini, que en estos días retoca los últimos detalles del presupuesto 2001 que enviará en dos semanas a la Legislatura provincial, insistió en afirmar que “no hay forma de resolver las cuestiones de orden fiscal si no se resuelve, previamente, la cuestión económica con una política diferente”.
El titular de la cartera económica aseguró que la provincia va a cumplir con el nivel de gastos previstos y que se mantendrán los programas sociales.
Sarghini también señaló que “se puede evaluar la posibilidad de tercerizar algunas de las tareas que son parte de la administración tributaria” y considera necesario “que ( a nivel nacional) haya un shock inducido, apoyado en medidas de corto plazo que generen una reactivación del mercado interno”.
El funcionario bonaerense se mostró en clara coincidencia con el programa de José Manuel de la Sota en Córdoba. “Si la propuesta sigue siendo aumentar impuestos y bajar gastos, en una economía estancada, esto trae más recesión y mantiene vigente el problema del déficit”, dijo.
“Las medidas de corto plazo de este nuevo enfoque son básicamente bajar impuestos, flexibilizar la política del Banco Central, diseñada para afrontar una crisis financiera como la del Tequila en 1995, para bajar la tasa de interés por esa vía, además de consensuar políticas antievasivas y en materia de comercio exterior”, consideró el ministro de economía de la provincia de Buenos Aires.
Todo ello será posible, según la visión del funcionario, “a partir de un fuerte acuerdo político para generar confianza interna, bajar costos y producir un cambio en las expectativas generales”.
