Calvo: “La inversión prefiere ir a Brasil”

El economista jefe del BID atribuyó, este comportamiento, al tipo de cambio y a la "incertidumbre" política. No cree que la construcción aporte mucho al crecimiento, tampoco espera un repunte del consumo. Insiste con dolarizar la economía.

7 febrero, 2001

Guillermo Calvo, quien ahora es economista en jefe del Banco Interamericano de Desarrollo, reafirmó que la argentina debe dolarizar su economía y que Brasil debe acotar la fluctuación de su moneda.

En una entrevista con el diario La Nación, Calvo, que fue asesor del ex ministro de Economía Roque Fernández, no evitó su habitual tono crítico hacia la actual administración. Dijo que la construcción puede aportar poco crecimiento, en contra de la opinión del equipo económico que apuesta al plan de infraestructura, y advirtió que no cabe esperar una expansión del consumo este año.

En todo caso—sentenció Calvo— el crecimiento debería llegar de la mano de la inversión, aunque ésta, afirmó, “prefiere ir a Brasil”.

El economista asegura que el efecto del blindaje durará “por mucho tiempo”, si la Argentina accede a tasas razonables y afirma no ser “tan optimista” respecto a las proyecciones de crecimiento aunque evaluó que, tras dos años de recesión, la pauta de 2,5% puede cumplirse.

Calvo continúa sosteniendo que la Argentina debe dolarizar su economía; esto permitiría, según el experto, lograr una rebaja en la tasa de interés que contribuiría a una reactivación sostenible.

Guillermo Calvo, quien ahora es economista en jefe del Banco Interamericano de Desarrollo, reafirmó que la argentina debe dolarizar su economía y que Brasil debe acotar la fluctuación de su moneda.

En una entrevista con el diario La Nación, Calvo, que fue asesor del ex ministro de Economía Roque Fernández, no evitó su habitual tono crítico hacia la actual administración. Dijo que la construcción puede aportar poco crecimiento, en contra de la opinión del equipo económico que apuesta al plan de infraestructura, y advirtió que no cabe esperar una expansión del consumo este año.

En todo caso—sentenció Calvo— el crecimiento debería llegar de la mano de la inversión, aunque ésta, afirmó, “prefiere ir a Brasil”.

El economista asegura que el efecto del blindaje durará “por mucho tiempo”, si la Argentina accede a tasas razonables y afirma no ser “tan optimista” respecto a las proyecciones de crecimiento aunque evaluó que, tras dos años de recesión, la pauta de 2,5% puede cumplirse.

Calvo continúa sosteniendo que la Argentina debe dolarizar su economía; esto permitiría, según el experto, lograr una rebaja en la tasa de interés que contribuiría a una reactivación sostenible.

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