“Espero que nuestros amigos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no hagan cosas que perjudiquen nuestra economía”, dijo George W. Bush.
Aunque las reservas de petróleo almacenadas en Estados Unidos aumentaron la semana pasada, el crudo subió ayer un 4 por ciento en Nueva York después de que la OPEP anunciará el recorte, que supone la producción de 900.000 barriles de crudo menos al día.
El precio del crudo de Texas para entrega en noviembre subió 1,11 dólares y se situó en 28,24 dólares por barril, después de tocar los 28,44 dólares en los inicios de la sesión.
El precio del crudo Brent para noviembre también reaccionó al alza en el mercado de Londres y quedó a 26,67 dólares, después de una subida de 1,15 dólares, o un 4,5 por ciento, respecto al martes pasado.
Pese al mensaje de Bush, la Casa Blanca aseguró que no interferirá en las decisiones de la OPEP, y su portavoz, Scott McClellan, señaló que “nosotros siempre hemos dicho que los precios del crudo debería ser determinado por las fuerzas del mercado”.
“Esta es la manera de asegurar adecuadamente los suministros.
Tanto los países productores como los consumidores tienen interés en que los suministros de energía sean abundantes y asequibles”.
Fuente: EFE
“Espero que nuestros amigos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) no hagan cosas que perjudiquen nuestra economía”, dijo George W. Bush.
Aunque las reservas de petróleo almacenadas en Estados Unidos aumentaron la semana pasada, el crudo subió ayer un 4 por ciento en Nueva York después de que la OPEP anunciará el recorte, que supone la producción de 900.000 barriles de crudo menos al día.
El precio del crudo de Texas para entrega en noviembre subió 1,11 dólares y se situó en 28,24 dólares por barril, después de tocar los 28,44 dólares en los inicios de la sesión.
El precio del crudo Brent para noviembre también reaccionó al alza en el mercado de Londres y quedó a 26,67 dólares, después de una subida de 1,15 dólares, o un 4,5 por ciento, respecto al martes pasado.
Pese al mensaje de Bush, la Casa Blanca aseguró que no interferirá en las decisiones de la OPEP, y su portavoz, Scott McClellan, señaló que “nosotros siempre hemos dicho que los precios del crudo debería ser determinado por las fuerzas del mercado”.
“Esta es la manera de asegurar adecuadamente los suministros.
Tanto los países productores como los consumidores tienen interés en que los suministros de energía sean abundantes y asequibles”.
Fuente: EFE