Bush pide US$ 51.800 millones, pero Katrina exigirá más del doble

El presidente elevará al congreso un pedido de fondos por US$ 51.800 millones para rescates y otras tareas relacionadas con el huracán en por lo menos cinco estados. Mientras tanto, se acerca Ofelia por el oeste de Florida.

7 septiembre, 2005

En rigor, el poder ejecutivo ya había solicitado US$ 10.500 millones. Pero esta suma se aplicará en teoría a las necesidades más acuciantes entre los sobrevivientes. A raíz de ese segundo pedido, legisladores de ambos partidos exigen el defenestramiento de varios altos funcionarios de la Casa Blanca, considerados ineptos para encarar esta crisis.

El nuevo paquete incluye US$ 50.000 millones para la agencia federal de emergencias, cuyo titular es uno de los más criticados por los medios. Habrá además 1.400 millones para el departamento de Defebsa y 400 millones para el cuerpo de ingenieros del ejército, vinculado a contratos leoninos obtenidos por Halliburton (o sea, Richard Cheney) en Irak.

Por otra parte, los poderes ejecutivo y legislativo analizarán, separamente, fondo y medidas a mayor plazo para reonstruir lo se pueda en las áreas urbanas más castigadas. Por de pronto, fuentea allegada al comité bicameral de presupuesto estiman que esas partidas adicionales podrían sumar más de US$ 100.000 millones.

Este tipo de erogaciones, en un marco de déficit altos en lo fiscal y los pagos externos, hace sospechar dos cosas a analistas de Wall Street. Una, que el producto bruto intermno de 2005 acabe 1% inferior a las proyecciones del II trimestre (3,5% anual). Otra, que se perderán más de 400.000 empleos en las zonas afectadas. De todas maneras, el desastre viene costando la mitad de lo malgastado en Irak hasta promediar el año.

En rigor, el poder ejecutivo ya había solicitado US$ 10.500 millones. Pero esta suma se aplicará en teoría a las necesidades más acuciantes entre los sobrevivientes. A raíz de ese segundo pedido, legisladores de ambos partidos exigen el defenestramiento de varios altos funcionarios de la Casa Blanca, considerados ineptos para encarar esta crisis.

El nuevo paquete incluye US$ 50.000 millones para la agencia federal de emergencias, cuyo titular es uno de los más criticados por los medios. Habrá además 1.400 millones para el departamento de Defebsa y 400 millones para el cuerpo de ingenieros del ejército, vinculado a contratos leoninos obtenidos por Halliburton (o sea, Richard Cheney) en Irak.

Por otra parte, los poderes ejecutivo y legislativo analizarán, separamente, fondo y medidas a mayor plazo para reonstruir lo se pueda en las áreas urbanas más castigadas. Por de pronto, fuentea allegada al comité bicameral de presupuesto estiman que esas partidas adicionales podrían sumar más de US$ 100.000 millones.

Este tipo de erogaciones, en un marco de déficit altos en lo fiscal y los pagos externos, hace sospechar dos cosas a analistas de Wall Street. Una, que el producto bruto intermno de 2005 acabe 1% inferior a las proyecciones del II trimestre (3,5% anual). Otra, que se perderán más de 400.000 empleos en las zonas afectadas. De todas maneras, el desastre viene costando la mitad de lo malgastado en Irak hasta promediar el año.

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