Automotrices pedirán menores impuestos
Terminales, autopartistas y trabajadores quieren una rebaja considerable para contrarrestar la caída de las ventas del sector automotor. El Gobierno prorrogó los certificados de importación.
Los representantes de la industria automotriz argentina elevarán en los próximos días una nota al Gobierno en la que pedirán una rebaja impositiva que ayude a paliar la difícil situación por la que atraviesa el sector, producto de la caída de las ventas en el mercado local.
La iniciativa, cuyos antecedentes más cercanos son las presentación que el sector hizo a las autoridades nacionales en agosto y diciembre de 2000, será llevada el jueves ante el secretario de Industria, Carlos Sanchez.
El Foro Productivo –portavoz de esta nueva embestida que nuclea a autopartistas, concesionarios, proveedores y gremios de trabajadores, además de algunas terminales asentadas en el país– buscará que el Gobierno acceda a reducir los impuestos que gravan la producción de autos, a cambio de una rebaja en los precios finales y un compromiso por no despedir trabajadores al menos por un año, mientras que los trabajadores se comprometerán a no exigir aumentos salariales hasta el año que viene.
Paralelamente, mientras ésta información circulaba por los medios de comunicación de todo el país, el Gobierno publicó hoy (martes 3) en el Boletín Oficial el decreto que otorga al sector automotor una prórroga por 30 días del uso de certificados de importación de autos de origen ajeno al Mercosur.
En esencia, este beneficio permitirá que las terminales que operan en el mercado local paguen un arancel de 2% para el ingreso de automóviles, mientras los demás sectores deberán hacerlo a 35%, tal cual se consignó en la ley de competitividad, que también fue aceptada por Brasil en el nuevo acuerdo de Política Automotor del Mercosur (PAM).
Los representantes de la industria automotriz argentina elevarán en los próximos días una nota al Gobierno en la que pedirán una rebaja impositiva que ayude a paliar la difícil situación por la que atraviesa el sector, producto de la caída de las ventas en el mercado local.
La iniciativa, cuyos antecedentes más cercanos son las presentación que el sector hizo a las autoridades nacionales en agosto y diciembre de 2000, será llevada el jueves ante el secretario de Industria, Carlos Sanchez.
El Foro Productivo –portavoz de esta nueva embestida que nuclea a autopartistas, concesionarios, proveedores y gremios de trabajadores, además de algunas terminales asentadas en el país– buscará que el Gobierno acceda a reducir los impuestos que gravan la producción de autos, a cambio de una rebaja en los precios finales y un compromiso por no despedir trabajadores al menos por un año, mientras que los trabajadores se comprometerán a no exigir aumentos salariales hasta el año que viene.
Paralelamente, mientras ésta información circulaba por los medios de comunicación de todo el país, el Gobierno publicó hoy (martes 3) en el Boletín Oficial el decreto que otorga al sector automotor una prórroga por 30 días del uso de certificados de importación de autos de origen ajeno al Mercosur.
En esencia, este beneficio permitirá que las terminales que operan en el mercado local paguen un arancel de 2% para el ingreso de automóviles, mientras los demás sectores deberán hacerlo a 35%, tal cual se consignó en la ley de competitividad, que también fue aceptada por Brasil en el nuevo acuerdo de Política Automotor del Mercosur (PAM).
