Alvarez insiste en no ser candidato
Reiterada negativa de Carlos Alvarez a su candidatura a Senador. Estaría trabajando en un proyecto de ley destinado a crear condiciones de transparencia en la Cámara Alta en el futuro.
Los analistas políticos analizan la reiteración de Carlos Alvarez en rechazar la candidatura a la senaduría nacional por la Capital Federal, concretada en una entrevista televisada en la víspera.
El ex vicepresidente había negado tal posibilidad en varias oportunidades, pero sus últimas declaraciones parecieran indicar que procura crear elementos de presión para dar respuesta al clamor general que exige una mayor transparencia en la actividad de la clase política argentina.
Cuando se mencionó la posibilidad de que en las elecciones de renovación legislativa se incluyera su nombre, algunos analistas señalaron la incongruencia de esa eventual actitud con las críticas realizadas por Alvarez a la presunta corrupción existente en el Congreso.
Su incorporación al Senado hubiera representado una suerte de resignación ante una situación que fuera imposible de cambiar y hasta una complicidad implícita con ella; de ahí, se estima, su firmeza expresiva al negar con contundencia su candidatura, a pesar de que círculos del Frepaso creían que era aún posible crear condiciones propicias para ella.
De no concretarse la purga que exigió en su momento en la Cámara Alta, algo que surge como improbable en estos momentos, esas condiciones no se podrán concretar de manera alguna, según la opinión generalizada de los analistas..
De todas maneras, en sus allegados se asegura que el eje de la acción de Alvarez se establece en un proyecto de ley destinado a despejar dudas sobre el futuro comportamiento del Senado; prevería que la cámara que surgirá de las elecciones de octubre contará con un presupuesto reducido, con tope para los gastos de los legisladores, tanto en lo que concierne a sus ingresos como al número de asesores con que podrán contar.
También se establecería la obligación de rendir puntualmente cuenta del dinero gastado por los senadores.
Reiterada negativa de Carlos Alvarez a su candidatura a Senador. Estaría trabajando en un proyecto de ley destinado a crear condiciones de transparencia en la Cámara Alta en el futuro.
Los analistas políticos analizan la reiteración de Carlos Alvarez en rechazar la candidatura a la senaduría nacional por la Capital Federal, concretada en una entrevista televisada en la víspera.
El ex vicepresidente había negado tal posibilidad en varias oportunidades, pero sus últimas declaraciones parecieran indicar que procura crear elementos de presión para dar respuesta al clamor general que exige una mayor transparencia en la actividad de la clase política argentina.
Cuando se mencionó la posibilidad de que en las elecciones de renovación legislativa se incluyera su nombre, algunos analistas señalaron la incongruencia de esa eventual actitud con las críticas realizadas por Alvarez a la presunta corrupción existente en el Congreso.
Su incorporación al Senado hubiera representado una suerte de resignación ante una situación que fuera imposible de cambiar y hasta una complicidad implícita con ella; de ahí, se estima, su firmeza expresiva al negar con contundencia su candidatura, a pesar de que círculos del Frepaso creían que era aún posible crear condiciones propicias para ella.
De no concretarse la purga que exigió en su momento en la Cámara Alta, algo que surge como improbable en estos momentos, esas condiciones no se podrán concretar de manera alguna, según la opinión generalizada de los analistas..
De todas maneras, en sus allegados se asegura que el eje de la acción de Alvarez se establece en un proyecto de ley destinado a despejar dudas sobre el futuro comportamiento del Senado; prevería que la cámara que surgirá de las elecciones de octubre contará con un presupuesto reducido, con tope para los gastos de los legisladores, tanto en lo que concierne a sus ingresos como al número de asesores con que podrán contar.
También se establecería la obligación de rendir puntualmente cuenta del dinero gastado por los senadores.
Los analistas políticos analizan la reiteración de Carlos Alvarez en rechazar la candidatura a la senaduría nacional por la Capital Federal, concretada en una entrevista televisada en la víspera.
El ex vicepresidente había negado tal posibilidad en varias oportunidades, pero sus últimas declaraciones parecieran indicar que procura crear elementos de presión para dar respuesta al clamor general que exige una mayor transparencia en la actividad de la clase política argentina.
Cuando se mencionó la posibilidad de que en las elecciones de renovación legislativa se incluyera su nombre, algunos analistas señalaron la incongruencia de esa eventual actitud con las críticas realizadas por Alvarez a la presunta corrupción existente en el Congreso.
Su incorporación al Senado hubiera representado una suerte de resignación ante una situación que fuera imposible de cambiar y hasta una complicidad implícita con ella; de ahí, se estima, su firmeza expresiva al negar con contundencia su candidatura, a pesar de que círculos del Frepaso creían que era aún posible crear condiciones propicias para ella.
De no concretarse la purga que exigió en su momento en la Cámara Alta, algo que surge como improbable en estos momentos, esas condiciones no se podrán concretar de manera alguna, según la opinión generalizada de los analistas..
De todas maneras, en sus allegados se asegura que el eje de la acción de Alvarez se establece en un proyecto de ley destinado a despejar dudas sobre el futuro comportamiento del Senado; prevería que la cámara que surgirá de las elecciones de octubre contará con un presupuesto reducido, con tope para los gastos de los legisladores, tanto en lo que concierne a sus ingresos como al número de asesores con que podrán contar.
También se establecería la obligación de rendir puntualmente cuenta del dinero gastado por los senadores.
Reiterada negativa de Carlos Alvarez a su candidatura a Senador. Estaría trabajando en un proyecto de ley destinado a crear condiciones de transparencia en la Cámara Alta en el futuro.
Los analistas políticos analizan la reiteración de Carlos Alvarez en rechazar la candidatura a la senaduría nacional por la Capital Federal, concretada en una entrevista televisada en la víspera.
El ex vicepresidente había negado tal posibilidad en varias oportunidades, pero sus últimas declaraciones parecieran indicar que procura crear elementos de presión para dar respuesta al clamor general que exige una mayor transparencia en la actividad de la clase política argentina.
Cuando se mencionó la posibilidad de que en las elecciones de renovación legislativa se incluyera su nombre, algunos analistas señalaron la incongruencia de esa eventual actitud con las críticas realizadas por Alvarez a la presunta corrupción existente en el Congreso.
Su incorporación al Senado hubiera representado una suerte de resignación ante una situación que fuera imposible de cambiar y hasta una complicidad implícita con ella; de ahí, se estima, su firmeza expresiva al negar con contundencia su candidatura, a pesar de que círculos del Frepaso creían que era aún posible crear condiciones propicias para ella.
De no concretarse la purga que exigió en su momento en la Cámara Alta, algo que surge como improbable en estos momentos, esas condiciones no se podrán concretar de manera alguna, según la opinión generalizada de los analistas..
De todas maneras, en sus allegados se asegura que el eje de la acción de Alvarez se establece en un proyecto de ley destinado a despejar dudas sobre el futuro comportamiento del Senado; prevería que la cámara que surgirá de las elecciones de octubre contará con un presupuesto reducido, con tope para los gastos de los legisladores, tanto en lo que concierne a sus ingresos como al número de asesores con que podrán contar.
También se establecería la obligación de rendir puntualmente cuenta del dinero gastado por los senadores.
