Alvarez enfrentado con radicales
El vicepresidente critica al titular de la cámara de Senadores y reclamó cambios en la mayoría de las bancadas de los legisladores implicados en el caso por supuestos sobornos.
Las diferencias entre el vicepresidente Carlos Alvarez y la mayoría de los integrantes de la bancada radical del Senado parecen no tener retorno tras las insistentes críticas del titular del Frepaso contra el presidente provisional de la Cámara alta, José Genoud.
Segundo y tercero en la línea sucesoria presidencial, Alvarez y Genoud fueron en la última semana protagonistas de declaraciones periodísticas de mutuo ataque, fundamentalmente del primero hacía el segundo.
Alvarez reclamó insistentemente que se realizaran cambios en los cargos de conducción de la cámara alta a partir del escándalo desatado por el supuesto cobro de coimas por parte de los senadores para la aprobación de la reforma laboral.
Así, logró las renuncias de los presidentes de las bancadas justicialista y radical, Augusto Alasino y Raúl Galván, quienes fueron reemplazados por José Luis Gioja y Mario Losada, respectivamente.
Sin embargo, y a pesar de los duros embates contra Genoud, Alvarez no pudo debilitarlo para hacerle resignar su condición de presidente provisional del cuerpo.
En este marco, varios senadores radicales esperan que el líder frepasista vuelva a conducir las sesiones para pasarle varias facturas que tienen pendientes, entre ellas algunas relacionadas con el amague de denuncia sobre la existencia de ñoquis entre el personal del Senado.
Otros lo aguardan para reprocharle la institucionalización del libelo que cuenta la supuesta trama secreta en la que se habría dado la negociación sobre la reforma laboral.
Entre las cuentas que debe rendir Alvarez también está el peregrinar del expediente judicial de la causa de los sobornos, que cuando llegó al Congreso fue trasladado hasta Casa de Gobierno y retornó en un margen de tres horas.
Las diferencias entre el vicepresidente Carlos Alvarez y la mayoría de los integrantes de la bancada radical del Senado parecen no tener retorno tras las insistentes críticas del titular del Frepaso contra el presidente provisional de la Cámara alta, José Genoud.
Segundo y tercero en la línea sucesoria presidencial, Alvarez y Genoud fueron en la última semana protagonistas de declaraciones periodísticas de mutuo ataque, fundamentalmente del primero hacía el segundo.
Alvarez reclamó insistentemente que se realizaran cambios en los cargos de conducción de la cámara alta a partir del escándalo desatado por el supuesto cobro de coimas por parte de los senadores para la aprobación de la reforma laboral.
Así, logró las renuncias de los presidentes de las bancadas justicialista y radical, Augusto Alasino y Raúl Galván, quienes fueron reemplazados por José Luis Gioja y Mario Losada, respectivamente.
Sin embargo, y a pesar de los duros embates contra Genoud, Alvarez no pudo debilitarlo para hacerle resignar su condición de presidente provisional del cuerpo.
En este marco, varios senadores radicales esperan que el líder frepasista vuelva a conducir las sesiones para pasarle varias facturas que tienen pendientes, entre ellas algunas relacionadas con el amague de denuncia sobre la existencia de ñoquis entre el personal del Senado.
Otros lo aguardan para reprocharle la institucionalización del libelo que cuenta la supuesta trama secreta en la que se habría dado la negociación sobre la reforma laboral.
Entre las cuentas que debe rendir Alvarez también está el peregrinar del expediente judicial de la causa de los sobornos, que cuando llegó al Congreso fue trasladado hasta Casa de Gobierno y retornó en un margen de tres horas.
