Al borde del default
El Gobierno decidió no pagar los 805 millones de dólares del vencimiento de deuda que opera hoy con el Banco Mundial. Sólo se pagarán 77 millones de dólares que corresponden a intereses de esa deuda.
La decisión pone a la Argentina al borde del default con los
organismos internacionales de crédito si no lograra un rápido
acuerdo con el FMI.
Sin embargo, el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, dijo que con ese giro se intenta evitar la cesación de pagos con los organismos multilaterales de crédito y “se demuestra la buena voluntad para seguir negociando el acuerdo base con el Fondo Monetario”.
La Argentina debía hacer hoy un pago de 805 millones, contando
intereses y capital, al Banco Mundial, que estaban postergados
desde el 15 de octubre, y llegará mañana a 30 días de mora.
De ese total, 670 millones corresponden a la obligación de hoy
y otros 133 millones a distintos vencimientos de programas
sociales y ayuda financiera a distintas áreas del Estado.
Los 77 millones de dólares pagados hoy por la Argentina
corresponden a los intereses de ese total de deuda.
El Gobierno fundamentó el pago parcial con el argumento de que
de “abonar la totalidad de la deuda que vencía hoy quedaría con un
nivel de reservas inferior al que se compromete en el acuerdo con
el FMI”.
En un comunicado oficial, el Gobierno sostuvo que si se pagaran
los 805 millones de dólares, las reservas quedarían por debajo de
los 9.000 millones que exige el FMI para mantener la solidez del
programa monetario”.
Al no pagar, el Banco Mundial dejaría de enviar nuevos
préstamos al directorio para su aprobación y la Argentina también
perdería elegibilidad para reducciones de 5 a 25 puntos de base
sobre los intereseses en los seis meses siguientes.
La Argentina tiene ahora 60 días de trámites burocráticos ante
la entidad para efectuar el pago y de esa manera evitar la
declaración formal de default.
El FMI tiene ahora la obligación de exigirle a la Argentina ese
pago al Banco Mundial, por parte de la Argentina, para evitar
crear un precedente entre los paises deudores del organismo.
Con ese pedido, el organismo busca evitar que ese camino sea
imitado por Brasil, que en los próximos días enfrenta un
vencimiento de deuda importante y afronta serios problemas para
pagarlo.
La decisión pone a la Argentina al borde del default con los
organismos internacionales de crédito si no lograra un rápido
acuerdo con el FMI.
Sin embargo, el jefe de Gabinete, Alfredo Atanasof, dijo que con ese giro se intenta evitar la cesación de pagos con los organismos multilaterales de crédito y “se demuestra la buena voluntad para seguir negociando el acuerdo base con el Fondo Monetario”.
La Argentina debía hacer hoy un pago de 805 millones, contando
intereses y capital, al Banco Mundial, que estaban postergados
desde el 15 de octubre, y llegará mañana a 30 días de mora.
De ese total, 670 millones corresponden a la obligación de hoy
y otros 133 millones a distintos vencimientos de programas
sociales y ayuda financiera a distintas áreas del Estado.
Los 77 millones de dólares pagados hoy por la Argentina
corresponden a los intereses de ese total de deuda.
El Gobierno fundamentó el pago parcial con el argumento de que
de “abonar la totalidad de la deuda que vencía hoy quedaría con un
nivel de reservas inferior al que se compromete en el acuerdo con
el FMI”.
En un comunicado oficial, el Gobierno sostuvo que si se pagaran
los 805 millones de dólares, las reservas quedarían por debajo de
los 9.000 millones que exige el FMI para mantener la solidez del
programa monetario”.
Al no pagar, el Banco Mundial dejaría de enviar nuevos
préstamos al directorio para su aprobación y la Argentina también
perdería elegibilidad para reducciones de 5 a 25 puntos de base
sobre los intereseses en los seis meses siguientes.
La Argentina tiene ahora 60 días de trámites burocráticos ante
la entidad para efectuar el pago y de esa manera evitar la
declaración formal de default.
El FMI tiene ahora la obligación de exigirle a la Argentina ese
pago al Banco Mundial, por parte de la Argentina, para evitar
crear un precedente entre los paises deudores del organismo.
Con ese pedido, el organismo busca evitar que ese camino sea
imitado por Brasil, que en los próximos días enfrenta un
vencimiento de deuda importante y afronta serios problemas para
pagarlo.
