Aftosa: Brasil refuerza sus fronteras
El estado de Río Grande do Sul levantó barreras sanitarias sus pasos fronterizos. En la Argentina, el Gobierno adoptó medidas en la frontera de Formosa con Paraguay, considerada la más riesgosa.
El gobierno regional del estado brasileño de Río Grande do Sul anunció hoy (miércoles 3) que instalará barreras sanitarias en ocho pasos fronterizos con Argentina por temor a que surjan de focos de fiebre aftosa en el país vecino.
La portavoz de la secretaría de Agricultura de Río Grande do Sul, Silvia Caviquiolhi, afirmó que las autoridades regionales están preocupadas por las noticias de periódicos de ambos países sobre posibles focos de fiebre aftosa en las provincias argentinas de Córdoba, Corrientes, Entre Ríos y Formosa.
“Mientras que la situación no sea aclarada, tendremos fiscales en los pasos fronterizos, que se dedicarán a desinfectar a todos los vehículos que ingresen a Brasil procedentes de la Argentina y a fiscalizar las cargas de origen animal y vegetal que lleguen de ese país”, dijo Caviquiolhi.
La misma fuente afirmó que la gobernación de Río Grande do Sul envió el martes un memorando al Ministerio brasileño de Agricultura pidiendo el inmediato cierre de la frontera al comercio de animales vivos y carnes, pero aclaró que las autoridades federales de Brasil no se han pronunciado sobre los supuestos focos de fiebre aftosa.
Según el Ministerio de Agricultura, Brasil podrá erradicar definitivamente la fiebre aftosa antes de 2005, pese a los brotes surgidos en los últimos meses en los países del Mercosur.
Mientras tanto, el Gobierno argentino decidió aislar a Formosa impidiendo al circulación de ganado, por considerar que la frontera con Paraguay es la más riesgosa y la que provocó la existencia de vacunos con sintomatología de enfermedad a mediados del año pasado, cuando fueron encontrados rodeos con serología positiva.
Además se instalaría cuarentena para el rodeo provincial, como medida adicional que, en su momento, permitirá determinar la situación sanitaria de los animales.
El rebrote de esta enfermedad, que fue conocido públicamente en agosto, alertó a ganaderos mientras el gobierno admitía la falta de controles en la frontera, ya que se indicó que el contrabando de animales desde el país vecino había provocado la crisis sanitaria.
El gobierno regional del estado brasileño de Río Grande do Sul anunció hoy (miércoles 3) que instalará barreras sanitarias en ocho pasos fronterizos con Argentina por temor a que surjan de focos de fiebre aftosa en el país vecino.
La portavoz de la secretaría de Agricultura de Río Grande do Sul, Silvia Caviquiolhi, afirmó que las autoridades regionales están preocupadas por las noticias de periódicos de ambos países sobre posibles focos de fiebre aftosa en las provincias argentinas de Córdoba, Corrientes, Entre Ríos y Formosa.
“Mientras que la situación no sea aclarada, tendremos fiscales en los pasos fronterizos, que se dedicarán a desinfectar a todos los vehículos que ingresen a Brasil procedentes de la Argentina y a fiscalizar las cargas de origen animal y vegetal que lleguen de ese país”, dijo Caviquiolhi.
La misma fuente afirmó que la gobernación de Río Grande do Sul envió el martes un memorando al Ministerio brasileño de Agricultura pidiendo el inmediato cierre de la frontera al comercio de animales vivos y carnes, pero aclaró que las autoridades federales de Brasil no se han pronunciado sobre los supuestos focos de fiebre aftosa.
Según el Ministerio de Agricultura, Brasil podrá erradicar definitivamente la fiebre aftosa antes de 2005, pese a los brotes surgidos en los últimos meses en los países del Mercosur.
Mientras tanto, el Gobierno argentino decidió aislar a Formosa impidiendo al circulación de ganado, por considerar que la frontera con Paraguay es la más riesgosa y la que provocó la existencia de vacunos con sintomatología de enfermedad a mediados del año pasado, cuando fueron encontrados rodeos con serología positiva.
Además se instalaría cuarentena para el rodeo provincial, como medida adicional que, en su momento, permitirá determinar la situación sanitaria de los animales.
El rebrote de esta enfermedad, que fue conocido públicamente en agosto, alertó a ganaderos mientras el gobierno admitía la falta de controles en la frontera, ya que se indicó que el contrabando de animales desde el país vecino había provocado la crisis sanitaria.
