<p>Sin embargo, no está aún claro si los dirigentes helenos desafiarán a la gente y por fin aceptarán el aceite de ricino impuesto por la “troika”. Este martes, el paro general con manifestaciones mantuvo cerrados bancos, oficinas públicas y escuelas. Los hospitales solo cubrían guardias y no funcionaban los transportes públicos.<br />
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El nuevo intento involucra tenencias de títulos en poder del BCE, que los había comprado con un importante descuento vía un controvertido programa. Ahora, el emisor zonal se compromete a renunciar a parte de sus réditos si los bonos se rescatasen al valor nominal. En su lugar, el BCE recibirá títulos emitidos por el Mecanismo de Estabilidad Financiera (MEF), ex Fondo Europeo pro Estabilización Financiera (FEEF).<br />
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En medio de estos cabildeos, algunos analistas temen que otro componente, la receta del FMI, no funcione en Grecia como ocurre desde fines del siglo 20. Se trata de una clásica exigencia del ente multilateral. Consiste en una quita de 20% en los salarios mínimos del sector privado y público, jubilaciones inclusive. ¿Qué significa eso? Que, sin poder devaluar la moneda (el euro), se deprecian las variables internas. <br />
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El recurso es típico de los modelos macroeconómicos del FMI, pero tiene un inconveniente. En economías endeudadas y debilitadas por la fuga de capitales, desde los años setenta esa fórmula acelera violentos colapsos. Lo sucedido en 1997/98 (Indonesia, Malasia, Tailandia, Rusia, Turquía) o en Argentina (2001/03) señala cual será el destino griego.<br />
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Afloja el BCE y puede haber acuerdo con Grecia
El Banco Central Europeo quizá destrabe el nudo gordiano (en Atenas, no en Frigia). Sin alterar las draconianas exigencias del Fondo Monetario Internacional, Bruselas ni el mismo BCE, este permitirá incluir bonos propios en la restructuración.