De acuerdo a las cifras dadas a conocer por el Estimador Mensual Industrial (EMI), la actividad industrial se habría estancado en los primeros seis meses del año. Si se comparan los datos del mes de junio, con los de diciembre de 1999, la actividad en las empresas industriales bajó alrededor de 0,5%. En cambio, si se evalúa el primer semestre del 2000 ,frente al mismo período del año anterior, la actividad creció entre 3% y 6%.
El panorama de la producción presentó un escenario con características particulares en lo que va del año: la recuperación de las exportaciones no fue acompañada por el mercado interno. Esto produjo que aquellos sectores más dependientes de la demanda externa pudieran mejorar su situación, tal el caso de la siderurgia; quienes se encuentran atados al mercado interno, no han podido reaccionar.
El sector automotriz muestra una combinación de ambas realidades: mientras las ventas locales cayeron, las exportaciones comenzaron a crecer; así las terminales pudieron mantener su ritmo de producción.
El perdedor del semestre es, sin dudas, la construcción. En el primer semestre, el despacho de las bolsas de cemento habría caído 25%. Se espera que el Plan de Infraestructura pueda paliar la crítica coyuntura por la que atraviesa este sector.
De acuerdo a las cifras dadas a conocer por el Estimador Mensual Industrial (EMI), la actividad industrial se habría estancado en los primeros seis meses del año. Si se comparan los datos del mes de junio, con los de diciembre de 1999, la actividad en las empresas industriales bajó alrededor de 0,5%. En cambio, si se evalúa el primer semestre del 2000 ,frente al mismo período del año anterior, la actividad creció entre 3% y 6%.
El panorama de la producción presentó un escenario con características particulares en lo que va del año: la recuperación de las exportaciones no fue acompañada por el mercado interno. Esto produjo que aquellos sectores más dependientes de la demanda externa pudieran mejorar su situación, tal el caso de la siderurgia; quienes se encuentran atados al mercado interno, no han podido reaccionar.
El sector automotriz muestra una combinación de ambas realidades: mientras las ventas locales cayeron, las exportaciones comenzaron a crecer; así las terminales pudieron mantener su ritmo de producción.
El perdedor del semestre es, sin dudas, la construcción. En el primer semestre, el despacho de las bolsas de cemento habría caído 25%. Se espera que el Plan de Infraestructura pueda paliar la crítica coyuntura por la que atraviesa este sector.