La temporada de desfile de este año está oficialmente cancelada. Chanel canceló su desfile en Capri, Italia; Gucci pospuso su presentación en San Francisco; Dior y Prada también pospusieron las suyas.
La Met Gala se pospuso indefinidamente. Las principales casas de moda con sede en Milán han quedado seriamente afectadas pero muchas, incluidas Versace, Armani y Prada están haciendo enormes donaciones. Armani realizó su presentación del año a puertas cerradas. LVMH dejó de fabricar perfumes para producir alcohol en gel que será donado a los hospitales franceses. En Nueva York, Pyer Moss convirtió sus oficinas en centro de donaciones y comenzó a financiar para ayudar a otras pequeñas empresas.
El gran temor es que que no se sabe cuánto durará esta crisis ni cuán profundo será el daño humano y económico. Pero para el negocio de la moda, al menos, hay algunas señales esperanzadoras. Las ventas suntuarias en China están camino a la recuperación. Y hasta hay colas en las boutiques de Chanel.
La mayoría de la gente en el negocio o está bajo condiciones de bloqueo o de distanciamiento social, como el resto del mundo. En la Costa Este de Estados Unidos, los diseñadores de moda han iniciado un Instagram viral para mostrar sus trabajos desde ssus casas.